más allá de discutir la ilegitimidad democrática de la Corona (muchas grabdes democracias son monarquías parlamentarias), es evidente que el actual rey no cumple con su obligación de garantizar el cumplimiento del pacto constitucional. Su ilegitimidad no es pues, para mí, de concepto, sino política, por sus hechos. La IIª república fue criminal y totalitarial. Volver a ese engendro sería peor todavía. Si se abre un proceso constituyente, la izquierda y el nacionalismo propugnarén un federalismo asimétrico que acabará con lo que queda de España, y un régimen de partidos con ejecutivo. débil. La única salida es una república de corte presidencial, centralizada en un ejecutivo fuert6e, con una cámara de control eficiente y una justicia completamente desligada del poder político. Pero antes de aceptar eso, la izquierda y los nacionalismos preferirán una guerra civil.
4 comentarios:
Que corona, digo, que cruz, bueno, que descojone....jjaja
Todo el prestigio que podía tener la corona como garante del estado lo ha perdido al permitir que se corrompa y se desestructure de semejante manera.
Seguro que la infantita Cristina de Borbón y Borbón alias La Caixa no inmersiona a sus niños en 100 % catalán, como obligan al resto de los mortales.
Señor jefe del estado, Don Juan Carlos I de Borbón y Borbón, nos tememos que su futuro no es nada prometedor.
No se puede estar viviendo toda una vida de los réditos de una sola noche.
la familia real desterrada a marruecos, o a bequeira, o a su velero; pero que dejen de vivir del cuento
menudo una mierda rey
espero que si viene otro tejero el capullo ese se quede en casa o que se vaya a cazar osos borrachos
!VIVA UNA CATALUÑA, PEQUEÑA Y LIBRE!
DI NO AL CATALAN Y A LOS CATALANES
BASTA YA
más allá de discutir la ilegitimidad democrática de la Corona (muchas grabdes democracias son monarquías parlamentarias), es evidente que el actual rey no cumple con su obligación de garantizar el cumplimiento del pacto constitucional. Su ilegitimidad no es pues, para mí, de concepto, sino política, por sus hechos. La IIª república fue criminal y totalitarial. Volver a ese engendro sería peor todavía. Si se abre un proceso constituyente, la izquierda y el nacionalismo propugnarén un federalismo asimétrico que acabará con lo que queda de España, y un régimen de partidos con ejecutivo. débil. La única salida es una república de corte presidencial, centralizada en un ejecutivo fuert6e, con una cámara de control eficiente y una justicia completamente desligada del poder político. Pero antes de aceptar eso, la izquierda y los nacionalismos preferirán una guerra civil.
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