Leo una noticia sobre la publicación de las memorias del filólogo Xavier Pericay, uno de los impulsores del proyecto Ciutadans, que pudo haber sido y no es. La noticia dice así: “el filólogo Xavier Pericay publica sus memorias como “disidente de Cataluna” por su cultura “oficial”.
Me sorprende lo de Cataluna, supongo que se deberá a que el elaborador de la noticia no disponía de un teclado que incluyera la letra ñ. Claro, y no iba a poner en esta noticia “Catalunya”, porque “disidente de Catalunya” no queda bien, es como reconocer que en Catalunya hay disidentes, ¡qué barbaridad!, ¡disidentes en el oasis!.
En Catalunya se subvencionarán, al tiempo, precisamente los ordenadores que no incluyan la letra ñ, si ya no se hace. Es necesario continuar la cruzada de ERC y deformar la realidad discretamente, al paso de la abolición de los signos y los símbolos españoles, las horas de español (castellano) en las escuelas, y las letras del abecedario español (castellano).
Erradicarse de la alienación de lo español es el proceso oficial y propósito fundamental del tripartit, quizás el único fundamento ideológico de su constitución como gobierno , aunque fundamentos económicos no le faltan, para continuar en el juego de la política viviendo del cuento.
Así, Cataluña, ya no es tampoco Catalunya, sino Cataluna o Cataluná.
Quisiera ser tan alto como la luná,
¡ay, ay!,
como la luná, como la luná,
para ver los soldadados de Cataluná,
¡ay! ¡ay!,
de Cataluná, de Cataluná
Que magnífico esperpento postmoderno, el frikismo de los advenedizos es insoportable, la irredenta memez resulta inverosímil. Saura, Carod y Montilla, representan el espectáculo de la mediocridad circense, “el trío de Cataluná”, organizando ese juego de inventar patrias, rentable para sus bolsillos y sus intereses, del que se reiría hasta el payaso más famoso de Cataluná, Charlie Rivel, el clown que lloraba, y no es de extrañar que lo hiciera, viendo lo que venía, más que clown, era profeta.
Biante de Priena
Me sorprende lo de Cataluna, supongo que se deberá a que el elaborador de la noticia no disponía de un teclado que incluyera la letra ñ. Claro, y no iba a poner en esta noticia “Catalunya”, porque “disidente de Catalunya” no queda bien, es como reconocer que en Catalunya hay disidentes, ¡qué barbaridad!, ¡disidentes en el oasis!.
En Catalunya se subvencionarán, al tiempo, precisamente los ordenadores que no incluyan la letra ñ, si ya no se hace. Es necesario continuar la cruzada de ERC y deformar la realidad discretamente, al paso de la abolición de los signos y los símbolos españoles, las horas de español (castellano) en las escuelas, y las letras del abecedario español (castellano).
Erradicarse de la alienación de lo español es el proceso oficial y propósito fundamental del tripartit, quizás el único fundamento ideológico de su constitución como gobierno , aunque fundamentos económicos no le faltan, para continuar en el juego de la política viviendo del cuento.
Así, Cataluña, ya no es tampoco Catalunya, sino Cataluna o Cataluná.
Quisiera ser tan alto como la luná,
¡ay, ay!,
como la luná, como la luná,
para ver los soldadados de Cataluná,
¡ay! ¡ay!,
de Cataluná, de Cataluná
Que magnífico esperpento postmoderno, el frikismo de los advenedizos es insoportable, la irredenta memez resulta inverosímil. Saura, Carod y Montilla, representan el espectáculo de la mediocridad circense, “el trío de Cataluná”, organizando ese juego de inventar patrias, rentable para sus bolsillos y sus intereses, del que se reiría hasta el payaso más famoso de Cataluná, Charlie Rivel, el clown que lloraba, y no es de extrañar que lo hiciera, viendo lo que venía, más que clown, era profeta.
Biante de Priena