La mayoría de los españoles coincidimos en que el principal problema que tenemos en la desternillante situación política que estamos atravesando en este país, está representado por Zapatero, ese aprendiz de brujo al que hace tiempo que se le estropeó la varita mágica. Pero posiblemente no seamos menos los que consideramos que el PP no es la solución a los problemas que nos ha creado Zapatero. La razón es sencilla, tanto el Gobierno como la Oposición son responsables de todo lo ocurrido. Mariano Rajoy se ha convertido en un auténtico héroe del silencio.
PSOE y PP han demostrado no saber resolver los problemas de los españoles y ambos han suspendido la tarea encomendada. Dirán algunos que más responsabilidad tiene el Gobierno, bueno, eso es relativo, porque la Oposición tiene suficientes mecanismos y recursos para modular la nefasta gestión política del Gobierno, incluso para frenarla o bloquearla, pero como viven entre el complejo y el milagro, nos han devuelto a los ciudadanos el pescado podrido para que lo digiramos con penuria y perplejidad.
Los del PP se han convertido en la sombra del Gobierno para dejar de ser oposición, porque una oposición tiene el deber de oponerse, y no la facultad contemplativa de ver como el país se va a la mierda sin hacer nada. Que sí, que ya sé que Arriola ha dicho que ni moverse, que estos del PSOE se caen solos, pero el problema es que si se caen ellos, nos caemos todos, así que error magnífico para el asesor aúlico de Rajoy y la niña. Y todo para que no les sigan llamando fachas.
En fin, con gente así a donde vamos, si el Gobierno es el peor de la reciente historia de España, la oposición es la peor del mismo periodo. ¿Piensan ustedes que el Gobierno hubiera alcanzado una cota tan elevada en la estupidez si hubiera tenido una oposición que no hubiera hecho lo mismo?.
Así que lo tenemos claro, ni gobierno, ni oposición sirven para resolver los problemas que tenemos. La pregunta que cabe hacerse es por qué el PP ha hecho una oposición tan nefasta, pues fundamentalmente porque quiere mejorar su imagen, pero ha confundido moderación con inhibición, se ha contagiado del talante, y ha abandonado el puesto de Pim Pam Pum en que le había colocado el Gobierno, con su frase mágica: la derecha es culpable de todo.
Culpable es el Gobierno, eso está claro, que es el que decide y se equivoca, porque acertar lo desconoce, pero la oposición es responsable por omisión de ayuda al pueblo que la ha votado, porque nunca los ciudadanos españoles en la democracia vigente habíamos estado expuestos a una situación de indefensión tan pertinaz y nociva.
Creo que los españoles debemos ir pensando en alguna alternativa al maniqueo poder que nos ha traido hasta aquí, a lo que tenemos que añadir la vesania de los nacionalistas, la representación teatral de UPyD y el ecosuicidio de Izquierda Unida regresando al comunismo, permanentemente ocupados en defender su posicionamiento político, sin tener en cuenta la realidad en la que estamos viviendo. Lo tenemos difícil, muy difícil. La única alternativa que veo es la de desenmascarar el negocio que tienen montado los políticos de todos los partidos a costa de los españoles, pero eso llevará su tiempo y urgen soluciones.
Con lo fácil que sería para los españoles convencernos de una vez de que con estos representantes políticos no vamos a ningún lado y apoyar en las urnas alguna alternativa que estuviera dispuesta a romper la baraja, delimitando un nuevo marco político en el que cada caso de corrupción, cada error, cada barbaridad, cada irresponsabilidad fuera denunciada a la opinión pública sin descanso. Pero claro, para que eso ocurriera los españoles tendríamos que dejar de creer en lo que creemos y ponernos a crear el futuro.
Hay muchas formas de resolverlo, pero todas pasan por romper el juego que se tienen montado los políticos que actualmente nos representan, por supuesto también los sindicatos que permiten cinco millones de parados sin mover un dedo hasta el regreso de las vacaciones, y todas esas organizaciones civiles, subvencionadas por los distintos gobiernos, que callan y protestan al dictado de los que las abonan con nuestro dinero. Al igual que los medios de comunicación, que se han convertido en fotógrafos de la realidad, abandonando su función en la creación de opinión, porque dejarían de recibir subvenciones.
Lo tenemos difícil los españoles, hasta que no decidamos unirnos frente a los políticos que se han convertido, de forma ilegítima, en la nueva aristocracia que nos considera sus siervos, por no decir sus esclavos. Cada día que pasa sin que hagamos nada, crece su poder y mengua nuestra libertad.
Biante de Priena
PSOE y PP han demostrado no saber resolver los problemas de los españoles y ambos han suspendido la tarea encomendada. Dirán algunos que más responsabilidad tiene el Gobierno, bueno, eso es relativo, porque la Oposición tiene suficientes mecanismos y recursos para modular la nefasta gestión política del Gobierno, incluso para frenarla o bloquearla, pero como viven entre el complejo y el milagro, nos han devuelto a los ciudadanos el pescado podrido para que lo digiramos con penuria y perplejidad.
Los del PP se han convertido en la sombra del Gobierno para dejar de ser oposición, porque una oposición tiene el deber de oponerse, y no la facultad contemplativa de ver como el país se va a la mierda sin hacer nada. Que sí, que ya sé que Arriola ha dicho que ni moverse, que estos del PSOE se caen solos, pero el problema es que si se caen ellos, nos caemos todos, así que error magnífico para el asesor aúlico de Rajoy y la niña. Y todo para que no les sigan llamando fachas.
En fin, con gente así a donde vamos, si el Gobierno es el peor de la reciente historia de España, la oposición es la peor del mismo periodo. ¿Piensan ustedes que el Gobierno hubiera alcanzado una cota tan elevada en la estupidez si hubiera tenido una oposición que no hubiera hecho lo mismo?.
Así que lo tenemos claro, ni gobierno, ni oposición sirven para resolver los problemas que tenemos. La pregunta que cabe hacerse es por qué el PP ha hecho una oposición tan nefasta, pues fundamentalmente porque quiere mejorar su imagen, pero ha confundido moderación con inhibición, se ha contagiado del talante, y ha abandonado el puesto de Pim Pam Pum en que le había colocado el Gobierno, con su frase mágica: la derecha es culpable de todo.
Culpable es el Gobierno, eso está claro, que es el que decide y se equivoca, porque acertar lo desconoce, pero la oposición es responsable por omisión de ayuda al pueblo que la ha votado, porque nunca los ciudadanos españoles en la democracia vigente habíamos estado expuestos a una situación de indefensión tan pertinaz y nociva.
Creo que los españoles debemos ir pensando en alguna alternativa al maniqueo poder que nos ha traido hasta aquí, a lo que tenemos que añadir la vesania de los nacionalistas, la representación teatral de UPyD y el ecosuicidio de Izquierda Unida regresando al comunismo, permanentemente ocupados en defender su posicionamiento político, sin tener en cuenta la realidad en la que estamos viviendo. Lo tenemos difícil, muy difícil. La única alternativa que veo es la de desenmascarar el negocio que tienen montado los políticos de todos los partidos a costa de los españoles, pero eso llevará su tiempo y urgen soluciones.
Con lo fácil que sería para los españoles convencernos de una vez de que con estos representantes políticos no vamos a ningún lado y apoyar en las urnas alguna alternativa que estuviera dispuesta a romper la baraja, delimitando un nuevo marco político en el que cada caso de corrupción, cada error, cada barbaridad, cada irresponsabilidad fuera denunciada a la opinión pública sin descanso. Pero claro, para que eso ocurriera los españoles tendríamos que dejar de creer en lo que creemos y ponernos a crear el futuro.
Hay muchas formas de resolverlo, pero todas pasan por romper el juego que se tienen montado los políticos que actualmente nos representan, por supuesto también los sindicatos que permiten cinco millones de parados sin mover un dedo hasta el regreso de las vacaciones, y todas esas organizaciones civiles, subvencionadas por los distintos gobiernos, que callan y protestan al dictado de los que las abonan con nuestro dinero. Al igual que los medios de comunicación, que se han convertido en fotógrafos de la realidad, abandonando su función en la creación de opinión, porque dejarían de recibir subvenciones.
Lo tenemos difícil los españoles, hasta que no decidamos unirnos frente a los políticos que se han convertido, de forma ilegítima, en la nueva aristocracia que nos considera sus siervos, por no decir sus esclavos. Cada día que pasa sin que hagamos nada, crece su poder y mengua nuestra libertad.
Biante de Priena