Decía Napoleón que el único ejército al que no se puede
vencer es el formado por la opinión pública. Hoy, Mariano Rajoy ha comparecido ante los
medios de comunicación, para decirnos que él es honesto, pero sin reconocer,
siquiera, que en España hay un clima de
corrupción insoportable, por lo que sólo ha ganado tiempo, pues las críticas
sobre lo que ocurre en este país esquilmado por la representación política no
van a cesar con esta intervención, posiblemente, tras unos días de reflexión, todavía
se incrementen más.
Cada día hay más españoles que exigen responsabilidades
políticas y jurídicas a los miembros de la casta que se han aprovechado de la
democracia para hacerse un buen patrimonio personal, enriqueciendo a quienes
les han untado. Si es cierto que hay políticos honestos en este país, eso no quiere decir
que no los haya deshonestos y de los deshonestos es de los que no se ha dado
respuesta en la comparecencia de Mariano Rajoy, ¿acaso de todo lo qué ha ocurrido
no hay nadie responsable?
En este país la opinión pública está harta de que la
corrupción del PP se tape apelando a la corrupción del PSOE y viceversa, que se
señale a los demás mientras se oculta lo
propio. En realidad, los españoles sabemos que se lo llevaron entre los dos, el
PSOE y el PP, junto con los demás partidos políticos, los sindicatos CCOO y UGT
y algunas otras instituciones del Estado, de las autonomías y de los
ayuntamientos. Cuánto se llevó cada uno importa menos, que saber que se lo
llevaron entre todos.
Mariano Rajoy ha dicho que no se ha llevado nada, ni ha
repartido nada de forma ilegal, eso no quiere decir que alguien no lo haya
hecho desde su partido. La estrategia de Mariano Rajoy ha sido la de ponerse
delante del foco o la cámara, para que no se vea todo lo que hay detrás. Está
bien, señor Rajoy, suponiendo que usted sea honesto, eso no quiere decir que
sea competente en este caso, sino que nos lleva a una situación aún más
escabrosa, ¿si usted es honesto por qué no persigue la corrupción en este país?
¿por qué no reconoce la corrupción en este país? ¿por qué siendo Presidente del
Gobierno por un partido con mayoría parlamentaria no ha puesto usted en marcha
los mecanismos para acabar con esta lacra que lastra nuestro país absolutamente
esquilmado con seis millones de parados que claman trabajo y que se añaden a
cuarenta millones de españoles que claman justicia?
Sr. Rajoy si es usted honesto, enhorabuena, ese ha de ser un
requisito indispensable para ocupar el cargo que usted ostenta, pero con tener
un presidente honesto no resolvemos los problemas que tenemos con la casta
política de la que usted forma parte, independientemente de su honestidad. Si
usted es honesto, ¿por qué no persigue la corrupción política hasta el último
rincón de nuestra historia reciente?
Definitivamente su honestidad no va a acallar la críticas ni
el cabreo de la opinión pública con lo que ha ocurrido recientemente y está
ocurriendo en este país, tan sólo es una maniobra de distracción. Los españoles
queremos un reconocimiento de lo que está ocurriendo y ha ocurrido con las
cuentas públicas y usted está obligado a darnos esa satisfacción, a perseguir
las mafias políticas integradas en los partidos, a ofrecernos las cabezas de
los responsables y a poner en marcha todas las medidas para que lo que ha ocurrido
no vuelva a ocurrir. Es una de sus
competencias con la que está siendo extraordinariamente negligente.
Verá usted, señor Rajoy, a estas alturas de la película somos
numerosos los españoles que sabemos lo que ha ocurrido, es cierto que en el PP
hay gente que no está en política por dinero, como puede ser su caso,
evidentemente si usted sale de la política
y regresa a su plaza de registrador de la propiedad, no va a ser lo
mismo que si lo hace la zurupeta de Elena Valenciano regresando a su puesto de
telefonista en la sede del PSOE o José Blanco a su puesto de conserje de
instituto, o Zapatero que nunca trabajó en nada más que en lo que le colocó su
padre, decano de abogados del colegio de León. Sí, toda esta gente regresara a
su actividad anterior lo iba a pasar muy mal después de haber vivido
magníficamente a costa de los españoles. Hoy el PSOE se ha reducido a un disco duro de marca SITEL en manos de
Alfredo Pérez Rubalcaba.
Eso es cierto, pero también es cierto, que usted no está
cumpliendo con su deber al permitir que en este país se hayan dado las cotas de
corrupción política más elevadas de la OCDE, llevando a los españoles a una situación
extrema, con un paro y deuda que son descomunales y una situación que comienza
a ser desesperada. Y también es cierto que hay muchas empresas que se han
beneficiado de la presencia del PP en el poder, muchos intereses compartidos
con el PSOE por ejemplo en el tema de las Cajas de Ahorros. ¿Es usted honesto
señor Rajoy sabiendo todo esto y no haciendo nada?
Sr. Rajoy tiene usted todo el poder, si no lo utiliza para
perseguir la corrupción política, está usted haciendo omisión de las
obligaciones que corresponden al cargo para el que fue elegido, por muy honesto
que usted se presuma, está siendo usted un incompetente que no merece ocupar el
cargo que detenta. ¿Por qué no persigue
usted la corrupción política en España si es tan honesto como dice? Esa es la
pregunta que nos estamos haciendo buena parte de los españoles tras su
comparecencia y no dejarlo claro abre numerosas preguntas nuevas que se han quedado sin
respuesta.
Procure hacer usted algo eficaz de forma urgente, antes de que la desconfianza de los españoles le acabe acorralando. No le queda mucho tiempo. Le deseo suerte.
Enrique Suárez