Como tras las grandes batallas de la historia, pasada la crisis económica que estamos viviendo, algún día tendremos que contar las bajas humanas, que pudieron ser evitadas, si quienes gobernaron este país se hubieran ocupado, prioritariamente, de evitar daños innecesarios a cualquier precio. No fue así y el retraso voluntario en la toma de decisiones o la toma de decisiones erróneas (algunas establecidas con insidia) nos ha conducido a una extravagante situación, en la que a pesar de haber comprobado que se cruzaron todas las fronteras del desatino y el despilfarro, todavía no tenemos a ningún responsable ante los tribunales o en la cárcel.
La irresponsabilidad de los que han gobernado este país es tan extraordinaria, que parece mentira que todavía nadie de los gobiernos de los últimos años, del PSOE, de los tribunales de cuentas, de la justicia española, de la oposición, de los que se llevaron el dinero a paraisos fiscales, no hayan sido conducidos ante la justicia española por los crímenes y delitos cometidos por aquellos que tomaron las decisiones que nos trajeron hasta aquí. Evidentemente, las decisiones no las tomó el viento, aunque sea el dueño de la Tierra, según algún iluminado.
Queridos compatriotas, no permitan que les sigan tomando el pelo, de los 5,6 millones de parados, 3,2 millones le deben la pérdida de su trabajo a la Z de Zapatero, a los defensores de la alegría que nos hacían hermosas canciones, a un partido político que dio, da y seguirá dando vergüenza, me refiero al PSOE, por supuesto; a los sindicatos y sus liberados, a los empresarios de la CEOE y sus apañados, pero también a la oposición, nacionalistas y PP, de la mirada para otro lado, y a todos los que lo hicieron posible. Entre ellos once millones de españoles que votaron engañados –dejándose engañar- por un partido que ha traído a este país, paro, ignorancia, pobreza, mezquindad y mucha miseria.
Se calcula que entre 45.000-60.000 millones de euros, sería la cantidad mínima de dinero que se desvió de las arcas públicas a manos privadas durante las dos últimas legislaturas, bien en forma de sobrecostes, pagos sobre obras inexistentes, operaciones dudosas, o directamente en forma de subvenciones, algunas a fondo perdido, a empresas de familiares y amigos, como los casos de Chaves o Blanco, o dádivas a los proyectos más peregrinos cobrados a precio de obra de arte japonesa.
Con esa cantidad se podrían pagar los subsidios a los parados durante todo un año, haber reducido en 200 puntos la prima de riesgo y no viviríamos ahora asfixiados porque los socialistas dejaron las arcas del Estado llenas de pagarés y deudas. Pero lo más extraño, es que no haya habido nadie que sea responsable de ningún error, tras el mayor desfalco que ha sufrido España en su historia. Ni siquiera una acusación por negligencia por el mal uso de dinero público, aunque en estos momentos hay abiertas unas cien por malversación a miembros del PSOE, entre ellos algún ministro, consejeros de distintas autonomías y otros altos cargos socialistas.
¿Por qué desde el PSOE se sigue negando que con su propaganda, que se ha engañado al pueblo, que se cometieron delitos fiscales, actos de corrupción y se ha puesto en peligro el bienestar de todos los españoles, con la estrategia de tierra quemada para el que viniera detrás?
No sé ustedes, pero yo lo tengo claro, mientras no veamos a algún miembro de los gobiernos de Zapatero en la cárcel, este país no recobrará el sentido común, seguiremos disfrutando de las bacanales sociales y los entramados parásitos que se crearon en los últimos ocho años. No es que el PP o los nacionalistas no tengan miserias que ocultar, que también las tiene, pero en proporción de menos del 1 % de las que cometieron los del PSOE.
Sigo sin comprender que tipo de pacto o acuerdo han establecido los del PSOE con los del PP para pasar página a tanta molicie, no tiene sentido que el PP cargue con el legado de miseria que les dejaron los del PSOE sin decir ni una palabra contra nadie que haya sido responsable, cierto es que se echarían a la calle las hordas de apesebrados, pero van a hacerlo igual, así que no se entiende como si hay que sacrificar el PSOE para que los mercados internacionales vuelvan a confiar en España, no se hace.
Hay demasiada oscuridad en este túnel, lo extraño es que hayamos cambiado de gobierno y a nadie se la haya ocurrido encender la luz, para ver con claridad la situación real en la que nos encontramos y posteriormente exigir responsabilidades a los que la causaron. Sin duda, si se viera esa firmeza en el Gobierno de Mariano Rajoy los mercados internacionales volverían a confiar en España, pero como van a hacerlo si en Andalucía siguen jugando al país de las maravillas de Zapatero, como si no se hubieran enterado de que este país está hundido para un par de décadas, gracias al socialismo.
Enrique Suárez
La irresponsabilidad de los que han gobernado este país es tan extraordinaria, que parece mentira que todavía nadie de los gobiernos de los últimos años, del PSOE, de los tribunales de cuentas, de la justicia española, de la oposición, de los que se llevaron el dinero a paraisos fiscales, no hayan sido conducidos ante la justicia española por los crímenes y delitos cometidos por aquellos que tomaron las decisiones que nos trajeron hasta aquí. Evidentemente, las decisiones no las tomó el viento, aunque sea el dueño de la Tierra, según algún iluminado.
Queridos compatriotas, no permitan que les sigan tomando el pelo, de los 5,6 millones de parados, 3,2 millones le deben la pérdida de su trabajo a la Z de Zapatero, a los defensores de la alegría que nos hacían hermosas canciones, a un partido político que dio, da y seguirá dando vergüenza, me refiero al PSOE, por supuesto; a los sindicatos y sus liberados, a los empresarios de la CEOE y sus apañados, pero también a la oposición, nacionalistas y PP, de la mirada para otro lado, y a todos los que lo hicieron posible. Entre ellos once millones de españoles que votaron engañados –dejándose engañar- por un partido que ha traído a este país, paro, ignorancia, pobreza, mezquindad y mucha miseria.
Se calcula que entre 45.000-60.000 millones de euros, sería la cantidad mínima de dinero que se desvió de las arcas públicas a manos privadas durante las dos últimas legislaturas, bien en forma de sobrecostes, pagos sobre obras inexistentes, operaciones dudosas, o directamente en forma de subvenciones, algunas a fondo perdido, a empresas de familiares y amigos, como los casos de Chaves o Blanco, o dádivas a los proyectos más peregrinos cobrados a precio de obra de arte japonesa.
Con esa cantidad se podrían pagar los subsidios a los parados durante todo un año, haber reducido en 200 puntos la prima de riesgo y no viviríamos ahora asfixiados porque los socialistas dejaron las arcas del Estado llenas de pagarés y deudas. Pero lo más extraño, es que no haya habido nadie que sea responsable de ningún error, tras el mayor desfalco que ha sufrido España en su historia. Ni siquiera una acusación por negligencia por el mal uso de dinero público, aunque en estos momentos hay abiertas unas cien por malversación a miembros del PSOE, entre ellos algún ministro, consejeros de distintas autonomías y otros altos cargos socialistas.
¿Por qué desde el PSOE se sigue negando que con su propaganda, que se ha engañado al pueblo, que se cometieron delitos fiscales, actos de corrupción y se ha puesto en peligro el bienestar de todos los españoles, con la estrategia de tierra quemada para el que viniera detrás?
No sé ustedes, pero yo lo tengo claro, mientras no veamos a algún miembro de los gobiernos de Zapatero en la cárcel, este país no recobrará el sentido común, seguiremos disfrutando de las bacanales sociales y los entramados parásitos que se crearon en los últimos ocho años. No es que el PP o los nacionalistas no tengan miserias que ocultar, que también las tiene, pero en proporción de menos del 1 % de las que cometieron los del PSOE.
Sigo sin comprender que tipo de pacto o acuerdo han establecido los del PSOE con los del PP para pasar página a tanta molicie, no tiene sentido que el PP cargue con el legado de miseria que les dejaron los del PSOE sin decir ni una palabra contra nadie que haya sido responsable, cierto es que se echarían a la calle las hordas de apesebrados, pero van a hacerlo igual, así que no se entiende como si hay que sacrificar el PSOE para que los mercados internacionales vuelvan a confiar en España, no se hace.
Hay demasiada oscuridad en este túnel, lo extraño es que hayamos cambiado de gobierno y a nadie se la haya ocurrido encender la luz, para ver con claridad la situación real en la que nos encontramos y posteriormente exigir responsabilidades a los que la causaron. Sin duda, si se viera esa firmeza en el Gobierno de Mariano Rajoy los mercados internacionales volverían a confiar en España, pero como van a hacerlo si en Andalucía siguen jugando al país de las maravillas de Zapatero, como si no se hubieran enterado de que este país está hundido para un par de décadas, gracias al socialismo.
Enrique Suárez