La historia del PSOE en democracia siempre ha estado adscrita a la de sus líderes, dos que han gobernado exactamente: Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Qué hemos aprendido los españoles de los gobiernos socialistas?. Pues sencillamente que a pesar de fundamentar su ideología en una defensa de la democracia asamblearia, siempre acaban representados por un lider que se aproxima a la divinidad.
Sigo pensando que el socialismo es una ideología intermedia entre la política y la religión, los comportamientos sectarios de sus seguidores así lo delatan. Nunca ha habido un socialista que haya gobernado para los españoles, porque cuando el PSOE alcanza el poder siempre acaba gobernando contra sus votantes en particular, y en general contra todos los españoles. Mientras hay riqueza que repartir, algo que habitualmente es heredado, se hartan de implantar su ideología con el dinero de todos, pero cuando las arcas comienzan a quedarse vacías, los primeros que sufren las consecuencias de sus numerosos dislates son sus propios seguidores.
A pesar de la escasa representatividad que tienen actualmente en España los sindicatos de clase, resulta paradójico que tras seis años de gobierno socialista, en el que los sindicatos se han beneficiado a costa del Estado como nunca, ahora le planteen al Gobierno una Huelga General para el próximo 29 de septiembre. De este viaje al PSOE se le cae la O de obrero para siempre, y posiblemente alguna letra más.
Pero en el PSOE saben soportar estoicamente los embates del destino, por eso, aunque ya tienen descontado a su Secretario General, le van a dejar pudrirse en el Gobierno, fundamentalmente por que saben que las próximas elecciones las tienen perdidas, tanto las autonómicas y municipales como las generales. Si en el partido apostaran por Zapatero, habrían provocado una moción de censura, pero le están dejando cocerse a él y todo su Gobierno en su propia salsa progresista. A los primeros que ha fallado Zapatero ha sido a los socialistas, a los sindicatos, a los 4,5 millones de parados, a los pensionistas congelados, a los funcionarios a los que ha recortado el sueldo –nadie se había atrevido a reducir el sueldo de los funcionarios, tan solo se había congelado en alguna ocasión- y a todos los españoles en general, que sufrimos su estulticia con subidas de impuestos y una recesión económica sin precedentes. Hasta los inmigrantes (un 13 % de los habitantes de este país) están sufriendo las inclemencias de un mercado laboral anémico, y una economía fláccida y aletargada.
Zapatero en su propia salsa
Cuando Zapatero se vaya nadie le va a echar de menos, ni los que le apoyaron, ni los demás. Al PSOE le viene una revolución encima con una primera entrega es el rifi rafe Gómez-Jiménez en Madrid. Tomás Gómez representa al partido es decir a los socialistas, Trinidad Jiménez al Gobierno, es decir a los progresistas. Los socialistas acudirán a la próxima huelga general, y prepararán en ella el asalto a Madrid, algo que no harán los progresistas, por lo tanto Tomás Gómez será el candidato socialista que disputará la Presidencia de la Comunidad Autónoma de Madrid a Esperanza Aguirre, pero también el líder emergente del socialismo, frente al progresismo representado por Rodríguez Zapatero. Es posible que Tomás Gómez sea el próximo candidato del PSOE en las Elecciones Generales, o él, o alguien muy próximo a él. Tomás Gómez no actúa solo, José Luis Rodríguez Zapatero está más solo que la una, solo le apoyan los cuadros del PSOE que ha colocado durante estos años. Los que apoyan a Tomás Gómez se han colocado bajo la pancarta del “No Pasarán”, porque huelen que va a ser el próximo hombre fuerte del partido.
Si en el PP hubiera gente inteligente en el partido, algo que Arriola ha impedido desde hace años, denostarían sutilmente a Tomás Gómez, y le facilitarían el triunfo y la derrota preliminar de Zapatero en su propio partido (por que el candidato que menos guste a la derecha es el que hay que votar). El PSOE hacía cosas de estas en los rifi rafes entre Gallardón y Aguirre y se quedaba tan fresco.
Si Trinidad Jiménez pierde en Madrid la lectura que habrá que hacer es que Zapatero habrá perdido en el PSOE, es decir, no contará con la confianza institucional de su propio partido, su comportamiento a partir de entonces es imprevisible, lo mismo se puede someter a una moción de confianza para demostrar que cuenta con apoyos suficientes para seguir al mando del PSOE, que puede decidir irse, que puede iniciar una alocada carrera contra el tiempo para tratar de recuperar el apoyo de sus votantes.
Aunque cabe la posibilidad de que Trinidad Jiménez triunfe en las primarias madrileñas, pero si lo hace –también si lo hace su adversario- tendrán un partido dividido en Madrid, algo realmente incómodo con unas elecciones autonómicas el año próximo. También cabría la posibilidad –algo que Zapatero ha procurado cargarse- de que Trinidad Jiménez renunciara a competir con Tómas Gómez o se incrustara en su candidatura, lo que serviría al PSOE para ganar tiempo, porque la posibilidad inversa, que Gómez se incrustara en la candidatura de Trinidad Jiménez es imposible.
Política de Tierra Quemada
De todas formas, será malo para este país, ocurra lo que ocurra, porque si en el 2011, con los presupuestos apoyados por el PNV, el PSOE tratará de que no se note la crisis con guiños al electorado, pero la cifra de parados no se moverá y la deuda seguirá creciendo, con lo que los impuestos tendrán que incrementarse y los gastos en servicios reducirse. Es decir, reducción de bienestar para los españoles. El Gobierno no está gobernando en estos momentos, no hay decisiones, ni siquiera hay actividad en el Parlamento, se limita a surfear sobre la realidad tapando agujeros. Hoy el Presidente de las Cajas de Ahorros ha denunciado la situación, advirtiéndonos de lo que se nos viene encima, porque en el año 2013 tenemos que converger con Europa, salvo excomunión, con un déficit del 3 % y rondamos el 11,5 %.
El PSOE va a poner en marcha una política de tierra quemada incrementando el gasto para triunfar en las próximas elecciones, y esa política será incendiaria como las pierda, porque de 2011 a 2012 que son las elecciones generales puede conceder a sus potenciales electores lo inimaginable con nuestro dinero, mejor dicho con nuestro endeudamiento, con el fin de triunfar en las elecciones.
Así que estamos ante la madre de todas las crisis, crisis interna en el seno del PSOE, crisis económica mundial con un impacto mucho mayor en nuestro país que en otros del entorno, crisis de ambición en el PP, en el que se verán rebeliones por doquier, sabiendo que tienen grandes posibilidades de acceder al gobierno y repartirse el botín del dinero público, crisis nacionalistas diversas aprovechando el barullo, crisis de convergencia con Europa, crisis con Marruecos y para concluir con el episodio, una profunda crisis de identidad en los españoles, que aún denostando a los políticos de todas las ideologías, no tienen ni idea de cómo configurar su malestar en un objetivo compartido de liberarse de tanta degradación en el clima político, que se ha vuelto extraordinariamente tóxico.
Seguro que al final, la realidad nos acabará sorprendiendo a todos.
Biante de Priena
Sigo pensando que el socialismo es una ideología intermedia entre la política y la religión, los comportamientos sectarios de sus seguidores así lo delatan. Nunca ha habido un socialista que haya gobernado para los españoles, porque cuando el PSOE alcanza el poder siempre acaba gobernando contra sus votantes en particular, y en general contra todos los españoles. Mientras hay riqueza que repartir, algo que habitualmente es heredado, se hartan de implantar su ideología con el dinero de todos, pero cuando las arcas comienzan a quedarse vacías, los primeros que sufren las consecuencias de sus numerosos dislates son sus propios seguidores.
A pesar de la escasa representatividad que tienen actualmente en España los sindicatos de clase, resulta paradójico que tras seis años de gobierno socialista, en el que los sindicatos se han beneficiado a costa del Estado como nunca, ahora le planteen al Gobierno una Huelga General para el próximo 29 de septiembre. De este viaje al PSOE se le cae la O de obrero para siempre, y posiblemente alguna letra más.
Pero en el PSOE saben soportar estoicamente los embates del destino, por eso, aunque ya tienen descontado a su Secretario General, le van a dejar pudrirse en el Gobierno, fundamentalmente por que saben que las próximas elecciones las tienen perdidas, tanto las autonómicas y municipales como las generales. Si en el partido apostaran por Zapatero, habrían provocado una moción de censura, pero le están dejando cocerse a él y todo su Gobierno en su propia salsa progresista. A los primeros que ha fallado Zapatero ha sido a los socialistas, a los sindicatos, a los 4,5 millones de parados, a los pensionistas congelados, a los funcionarios a los que ha recortado el sueldo –nadie se había atrevido a reducir el sueldo de los funcionarios, tan solo se había congelado en alguna ocasión- y a todos los españoles en general, que sufrimos su estulticia con subidas de impuestos y una recesión económica sin precedentes. Hasta los inmigrantes (un 13 % de los habitantes de este país) están sufriendo las inclemencias de un mercado laboral anémico, y una economía fláccida y aletargada.
Zapatero en su propia salsa
Cuando Zapatero se vaya nadie le va a echar de menos, ni los que le apoyaron, ni los demás. Al PSOE le viene una revolución encima con una primera entrega es el rifi rafe Gómez-Jiménez en Madrid. Tomás Gómez representa al partido es decir a los socialistas, Trinidad Jiménez al Gobierno, es decir a los progresistas. Los socialistas acudirán a la próxima huelga general, y prepararán en ella el asalto a Madrid, algo que no harán los progresistas, por lo tanto Tomás Gómez será el candidato socialista que disputará la Presidencia de la Comunidad Autónoma de Madrid a Esperanza Aguirre, pero también el líder emergente del socialismo, frente al progresismo representado por Rodríguez Zapatero. Es posible que Tomás Gómez sea el próximo candidato del PSOE en las Elecciones Generales, o él, o alguien muy próximo a él. Tomás Gómez no actúa solo, José Luis Rodríguez Zapatero está más solo que la una, solo le apoyan los cuadros del PSOE que ha colocado durante estos años. Los que apoyan a Tomás Gómez se han colocado bajo la pancarta del “No Pasarán”, porque huelen que va a ser el próximo hombre fuerte del partido.
Si en el PP hubiera gente inteligente en el partido, algo que Arriola ha impedido desde hace años, denostarían sutilmente a Tomás Gómez, y le facilitarían el triunfo y la derrota preliminar de Zapatero en su propio partido (por que el candidato que menos guste a la derecha es el que hay que votar). El PSOE hacía cosas de estas en los rifi rafes entre Gallardón y Aguirre y se quedaba tan fresco.
Si Trinidad Jiménez pierde en Madrid la lectura que habrá que hacer es que Zapatero habrá perdido en el PSOE, es decir, no contará con la confianza institucional de su propio partido, su comportamiento a partir de entonces es imprevisible, lo mismo se puede someter a una moción de confianza para demostrar que cuenta con apoyos suficientes para seguir al mando del PSOE, que puede decidir irse, que puede iniciar una alocada carrera contra el tiempo para tratar de recuperar el apoyo de sus votantes.
Aunque cabe la posibilidad de que Trinidad Jiménez triunfe en las primarias madrileñas, pero si lo hace –también si lo hace su adversario- tendrán un partido dividido en Madrid, algo realmente incómodo con unas elecciones autonómicas el año próximo. También cabría la posibilidad –algo que Zapatero ha procurado cargarse- de que Trinidad Jiménez renunciara a competir con Tómas Gómez o se incrustara en su candidatura, lo que serviría al PSOE para ganar tiempo, porque la posibilidad inversa, que Gómez se incrustara en la candidatura de Trinidad Jiménez es imposible.
Política de Tierra Quemada
De todas formas, será malo para este país, ocurra lo que ocurra, porque si en el 2011, con los presupuestos apoyados por el PNV, el PSOE tratará de que no se note la crisis con guiños al electorado, pero la cifra de parados no se moverá y la deuda seguirá creciendo, con lo que los impuestos tendrán que incrementarse y los gastos en servicios reducirse. Es decir, reducción de bienestar para los españoles. El Gobierno no está gobernando en estos momentos, no hay decisiones, ni siquiera hay actividad en el Parlamento, se limita a surfear sobre la realidad tapando agujeros. Hoy el Presidente de las Cajas de Ahorros ha denunciado la situación, advirtiéndonos de lo que se nos viene encima, porque en el año 2013 tenemos que converger con Europa, salvo excomunión, con un déficit del 3 % y rondamos el 11,5 %.
El PSOE va a poner en marcha una política de tierra quemada incrementando el gasto para triunfar en las próximas elecciones, y esa política será incendiaria como las pierda, porque de 2011 a 2012 que son las elecciones generales puede conceder a sus potenciales electores lo inimaginable con nuestro dinero, mejor dicho con nuestro endeudamiento, con el fin de triunfar en las elecciones.
Así que estamos ante la madre de todas las crisis, crisis interna en el seno del PSOE, crisis económica mundial con un impacto mucho mayor en nuestro país que en otros del entorno, crisis de ambición en el PP, en el que se verán rebeliones por doquier, sabiendo que tienen grandes posibilidades de acceder al gobierno y repartirse el botín del dinero público, crisis nacionalistas diversas aprovechando el barullo, crisis de convergencia con Europa, crisis con Marruecos y para concluir con el episodio, una profunda crisis de identidad en los españoles, que aún denostando a los políticos de todas las ideologías, no tienen ni idea de cómo configurar su malestar en un objetivo compartido de liberarse de tanta degradación en el clima político, que se ha vuelto extraordinariamente tóxico.
Seguro que al final, la realidad nos acabará sorprendiendo a todos.
Biante de Priena
