Tengo la intuición de que la operación “los papeles de Bárcenas”
va dirigida realmente contra María Dolores De Cospedal, mucho más que contra
Mariano Rajoy, el PP, o el Gobierno.
Otra cosa es que cada uno trate de sacar tajada de la
cuestión, a Rubalcaba le interesa que se asocie este asunto a Mariano Rajoy,
por eso está empecinado en unir su destino al de Bárcenas, como sea. El País
necesita una noticia exclusiva de rango histórico, porque atraviesa una perentoria situación económica. El Mundo, es decir, Pedro J., quiere jugar este
partido y amaga, pero repliega rápidamente. IU, pediría la dimisión de Rajoy
por estornudar y UPyD, por cualquier cosa, en particular después de las últimas
encuestas.
En cuanto al PP, alguien ha soltado un galgo para ver como
corren las liebres y ha generado una extraordinaria confusión en sus filas,
porque no se lo esperaban, nunca aprenderán. Hemos visto reacciones diversas,
pero precisamente, esa diversidad de reacciones indica que no todo lo que se ha
dicho es falso pero tampoco completamente cierto. La reacción ha sido de
sorpresa y espasmo. Por lo pronto han metido a Rajoy en un bunker mediático
para que nos cuente su desdichada y aburrida existencia, para ganar tiempo.
Visto que todo lo que hay, no es suficiente para horadar la fortaleza de la
gaviota, vendrá la reacción, dirigida por De Cospedal, que no va a ser amable,
delicada y diplomática, precisamente.
Hay tradición en el acoso y derribo al secretario general del
PP, sólo recordar la época del doberman con Cascos. Pero De Cospedal no es
Álvarez-Cascos, que en el fondo, por mucho que trate de ocultarlo, es tan apasionado
y visceral como lo era su mentor, Manuel Fraga. No hacía falta provocar mucho
para esperar una reacción furibunda. De Cospedal está llamada a ser “la dama de
hielo” del PP y en estos momentos está poniéndose de largo en una agresión
directa contra su partido que ocupa el Gobierno de España, tras haber obtenido mayoría
absoluta en las urnas (es importante recordarlo).
La reacción inicial de María Dolores de Cospedal fue la de negar
que la información publicada por El País fuera completamente cierta, algo que
parece que se está mostrando que es cierto, sin embargo algunas cosas que se
decían sí parecen serlo. Rajoy ha ganado tiempo diciendo que él está libre de
todo pecado económico. Y los demás implicados han amenazado con querellas. Tras
esta primera respuesta, vendrá la reacción que veremos en los próximos días. Lo
que ha hecho a continuación De Cospedal es poner en alerta a su partido,
diciendo que nadie se espere ayuda del PP si ha cometido alguna ilegalidad –estando
el Gürtell por juzgar, esto puede traer extrañas consecuencias-, y
posiblemente, que a partir de ahora, todo lo que se diga a la opinión pública
debe pasar antes por su conocimiento y autorización. Rajoy que siga gobernando,
que de esto se va a encargar ella personalmente.
Por mucho que se empeñe Rubalcaba, la suculenta historia de “los
papeles de Bárcenas” va a quedar reducida a humo en pocos días, entre otras
cosas porque Bárcenas ha dicho que la información publicada por El País es
falsa y que los apuntes que se ofrecen no son suyos, pero no sólo ha dicho eso,
sino que en el PP no había contabilidad en negro –que fue lo que no dijo Rajoy-,
además hay un dato importante, esos apuntes provienen de un contable y Bárcenas
lo fue durante menos de un año, porque en realidad él era gerente del partido,
es prácticamente imposible que no haya un cambio de letra en casi veinte años y
que el mismo bolígrafo haya escrito todos los apuntes.
Defendido el fuerte, viene el contraataque, por lo pronto, la
secretaria general del PP ya ha elegido objetivo al decir que Rubalcaba
mantiene una actitud cínica exigiendo responsabilidades tras haber hundido el
país, aquí comienza el preludio de la épica batalla que se inicia entre De
Cospedal y Rubalcaba. Parece que Oriol Pujol va a ser imputado por la trama de
las ITV, casualmente un caso en el que también podría estar relacionado José Blanco.
Creo que ahora sí vamos a conocer definitivamente lo que le
hizo el PSOE a este país en la época de Zapatero. Como en aquella película de
Los Inmortales, al final sólo puede quedar uno vivo. Me parece que se acabó la
casta para siempre, regresaremos al 11-M una y otra vez, e iremos conociendo todas las hazañas conocidas y desconocidas del "defensor de la alegría", hasta que Rubalcaba no
abandone la secretaría general del PSOE o De Cospedal presente su dimisión.
Para matar a un oso, primero hay que
tenerlo a tiro, y acertar en el disparo, pero también hay que saber desollarlo, antes de vender su piel. Desollar un oso vivo es peligroso.
Enrique Suárez