En las próxima convocatoria de
elecciones al Parlamento Europeo podremos comprobar el grado de conversión del
pueblo español y la salud de nuestra maltrecha democracia, en resumen la
madurez del sistema político en el que vivimos, algo que será directamente
proporcional a los votos que reciban todas las formaciones políticas que se
presentan a las urnas, en comparación con la suma de abstención, votos en
blanco y nulos, de los que no apoyan ninguna formación política.
La impresentable representación
política española, vive hoy su agonía, con un 83 % de españoles que consideran
que los partidos políticos son las instituciones más corruptas del Estado, con
un 66 % que considera que la corrupción política ha empeorado en los dos
últimos años, con un 43 % que consideran que la corrupción y el fraude son los
principales problemas de este país tras el paro y un 30 % que dicen que los
partidos políticos son el cuarto problema al que nos enfrentamos los españoles,
los resultados para los que nos embaucan en cada convocatoria electoral no
pueden ser buenos.
En septiembre de 2012, se cruzó el
Rubicón por primera vez, cuando los ciudadanos que decidieron en las encuestas
no apoyar a ninguna formación política, superaron a los que apoyaron a alguna,
desde esa fecha hasta hoy las cifras han empeorado y ya se considera que un
57,6 % de los españoles no acudirán a votar por ninguna formación política en
la próxima convocatoria a las elecciones continentales.
Ciertamente, las promesas que nos hagan
importan menos que el odio a las promesas que nos hagan los que peor nos caen;
en este país no se vota a favor de alguien, sino en contra de alguien, por eso
las propuestas cada día se hacen más radicales y esperpénticas. En la cuestión
política se sigue la misma trayectoria que en la información general: destaca
lo extraordinario, sobre la normalidad, por eso tenemos una democracia que
recuerda más un espectáculo que una forma de organizar la distribución de las
confianzas de los electores. Los políticos se han convertido en las nuevas
vedettes de la escenografía nacional, que nos cuentan sus hazañas comiendo
yogures caducados o defendiendo el feminismo trasnochado.
La cruzada mediática que van a
brindarnos tiene tanto que ver con la democracia como los delfines con los
árboles, es decir, nada, pero el espectáculo político está servido, millones de
euros derrochados y pagados por los españoles, para que nos brinden una
perspectiva dislocada de nuestra existencia, contándonos todo lo que van a
hacer si les concedemos confianza, pero nada de lo que han hecho con la
confianza que se les brindó en las elecciones anteriores. Nos dirán que van a
salvarnos de nosotros mismos, una vez más, mientras nos ocultan que nos han
hundido con la corrupción, el desfalco y la prevaricación. Son los nuevos
magos, hacen desaparecer nuestro bienestar, al mismo tiempo que se incrementa
el suyo, y lo hacen con nuestra complacencia, confianza y fidelidad.
Dicen los gurús de la doxología que un sistema político se quiebra de forma irremisible cuando un 70 % de ciudadanos no acuden a las urnas, lo que exige cambios radicales de forma inmediata por
parte de los que detentan el poder y usurpan la representación política en su
privilegio y beneficio exclusivos. Creo que en esta ocasión se puede lograr ese
triunfo para la democracia española, un 70 % de abstención, obligaría a quienes
dicen representarnos y sólo representan sus intereses y los de sus sectas, a
cambiar de actitud de forma inmediata, y al contrario de lo que dicen los defensores de la partitocracia, la abstención no beneficia a los partidos mayoritarios, sino que perjudica a todos.
Es hora de que los farsantes de todos los partidos sientan en su nuca el aliento gélido de un pueblo que se ha cansado de que le tomen el pelo y encima, cobrándole por ello.
Es hora de que los farsantes de todos los partidos sientan en su nuca el aliento gélido de un pueblo que se ha cansado de que le tomen el pelo y encima, cobrándole por ello.
Enrique Suárez
Ciudadanos en la Red: El 70 % de abstención derriba el sistema http://t.co/KPhS1VmuKl
— Enrique Suárez (@biantedepriena) April 12, 2014