¿Cuál es el precio que pagamos los españoles por vivir en
este país?, es una pregunta que muy pocos se han hecho, a continuación les
mostraré uno de los mayores misterios que el poder político oculta a los ojos
de los ciudadanos: el Estado, en todas sus dimensiones, recibe más plusvalías
de cada trabajador que el propio trabajador sobre su trabajo, es decir, que
todos los trabajadores españoles, posiblemente también los europeos, son
esquilmados de forma depredadora por sus impuestos.
¿Qué porcentaje creen ustedes que se lleva el Estado de sus
salarios? ¿20, 30, 40, 60 %? Bien, dependerá de los ingresos, pero posiblemente
se lleve más del 100 %, es decir, el Estado recauda más dinero del que percibe cada trabajador por su trabajo.
El salario medio de los españoles era de 2169 euros en 2013,
por doce pagas, lo que supone 26.027 euros al año. Ahora comenzaremos a restar
dinero, de 2169 euros (1859 euros por 14 pagas) brutos, comenzaremos a quitar:
Partimos de un sueldo de 2169 euros por doce pagas, del que
habrá que quitar
6,35 % de la seguridad social = 138 euros
18 % de IRPF = 390 euros
1,65 % desempleo y FP = 36 euros
El trabajador percibiría por tanto 1.605 euros en su nómina,
el Estado ha percibido hasta aquí 564 euros.
Pero por un sueldo bruto de 2169 euros, el empresario tiene que cotizar un 30 % más, es decir 650 euros más, eso es lo que paga el empresario por ese trabajador cada mes.
Además el Estado también
se lleva un porcentaje de los beneficios que no es menor del 25 %, supongamos
que el trabajador trabaja para une empresa y produce 10.000 euros de beneficios, pues el estado se
lleva 2.500 euros.
Es decir, hasta ahora el trabajador percibe 1.605 euros, y el
Estado se ha llevado 2500 euros de su producción, 564 de sus retenciones sobre
su sueldo y 650 de las cotizaciones pagadas
por su empresa por él, lo que suma en total 3714 euros.
Pero no acaba aquí la cuestión, de los 1605 euros el
trabajador supongamos que ahorra 300 euros cada mes, algo prácticamente
imposible, y dedica a mantenerse 1305 euros, sobre ese dinero habitualmente
utilizado en consumo se retira un porcentaje variable que va desde el 80 % en
el tabaco, el 60 % en los combustibles y energías, un porcentaje variable de
tasas municipales y por supuesto un 21 % de IVA, esto quiere decir que no menos
del 30 % de esos 1305 euros se va en impuestos, lo que añade 391 euros más al
expolio.
Sobre los 300 euros de ahorro se retirarán dependiendo de las sumas no
menos del 10 % al año por diversos capítulos, lo que sumado a lo anterior supone
otros 30 euros más 391 en total será 421 euros, que hay que retirar de los 1605
que percibe, así que le han quedado al final 1184 euros. A lo que habrá que
añadir posiblemente 100 euros más en la declaración por mes en la declaración
de la renta, así que al final el trabajador percibe realmente poco más de 1000
euros (1084 euros), mientras que el Estado ha percibido por su trabajo 4235 euros cada mes, en las condiciones que
se han expuesto.
Sí, han leído ustedes bien, por cada 1084 euros libres que
percibe un trabajador en España, el Estado ha extraído de él una plusvalía de
4235 euros. Si eliminamos el factor variable de producción (los 2500 euros, es una cifra aproximada) del
modelo expuesto, la plusvalía que extrae el Estado del trabajo de cada
productor, nos quedan entonces 1084 euros para el trabajador y 1735 euros para el Estado, con lo que se
demuestra que el Estado percibe más que cualquier trabajador del trabajo de
este.
Por dios, que no se entere nadie, que se puede armar muy gorda, no se os
ocurra comentarlo ni divulgarlo, que se estropea el negocio que se tienen
montado a costa de todos los españoles trabajadores y parados, porque los parados es una consecuencia de este modelo de latrocinio establecido por políticos, sindicatos y empresarios organizados al alimón. Y todo lo anterior hablando de los trabajadores por cuenta ajena, que si nos ocupamos de los autónomos todavía sería mayor la estafa.
Todos los españoles somos siervos del Estado y nuestro trabajo es su coartada para esquilmarnos.
Todos los españoles somos siervos del Estado y nuestro trabajo es su coartada para esquilmarnos.
Enrique Suárez