La ministra italiana de trabajo, informa, entre furtivas lágrimas, sobre los recortes necesarios que ha decidido su Gobierno. Italia y Europa entera lloramos con ella. Es hora de rendir cuentas, quienes han cometido errores deben rendir cuentas ante la justicia, sino se creará un estado de inmunidad e impunidad que impedirá cualquiera avance en el futuro.