Ayer me he llevado una alegría, hablaba con un primo que tengo en Córdoba, con esto de que estoy en Ciudadanos, pues no nos vemos nada, y va y me dice: oye tío, que el otro día entré con unos amigos en un bar y me acordé de ti, por lo de Ciudadanos.
Había un par de señores, ya mayores, y va uno y le dice al otro que se ha enterado que los de Ciudadanos, los del partido del chaval ese que salió desnudo en los carteles, que dicen que hay que votar NO al Estatuto; y le contesta el otro, pues en este caso valdrá más vestir al santo, que desnudar a la virgen, y me quede pensando. No lo entendí, luego me di cuenta de que se refería a Andalucía, y me reí.
Tras colgar, me quedé pensando en lo largos que son algunos en esta tierra. Y no le falta razón al ciudadano, ¿qué necesidad tiene Andalucía de un nuevo Estatuto?, pues la verdad que ninguna, si todavía hay más del 50 % por desarrollar del anterior. ¿Y por qué tienen tanto interés el PP, el PSOE, e IU en sacar un nuevo Estatuto?.
Lo primero que resulta sospechoso es que se unan IU y el PP en algo, que se una el gobierno de Andalucía con la oposición, que se una el PSOE con sus rivales políticos. No se ponen de acuerdo para nada y resulta que para lo del Estatuto de Andalucía se comandan. ¡Qué cosas más extrañas se ven en la política en los últimos tiempos!.
Así que pensando, pensando, he llegado a las siguientes conclusiones, que les expongo:
Si no hay necesidad de un nuevo Estatuto, porque lo han hecho de bricolage, solo porque los de Cataluña han sacado el suyo, y además se han puesto de acuerdo IU, PP, y PSOE para apoyarlo, no cabe otra explicación que lo que quieren es instrumentalizar la cuestión en beneficio propio. A estas alturas, ya sabemos que todos los políticos barren para su propia casa, ya son muchos años.
Vamos a ver, ¿usted compraría un coche nuevo, cuando el que tiene todavía está para durar un montón de años?, y quien dice un coche, dice una lavadora, un frigorífico, una televisión, o un ordenador. Evidentemente no, a no ser que le tocara la lotería.
¿Para qué se quiere un Estatuto último modelo?. Para presumir ante los amigos, para mostrarle al resto de España que Andalucía no es menos que Cataluña, para sentirse orgullosos de lo enormes que somos, o para nada de lo anterior. ¡Quién lo sabe!.
Al final solo encontré una explicación que al menos tiene sentido, lo hacen para legitimarse a sí mismos, para que veamos que son útiles, como el funcionario que cuando vamos a buscar algo muestra que está muy ocupado y que es muy necesario. Claro, es su trabajo. Y un nuevo Estatuto es como presentar una cuenta de resultados en una empresa. Andaluces, hemos trabajado, y aquí está la nueva gran ley que hemos hecho.
Y entonces me acordé del ridículo paleto que hicimos los españoles votando Sí a la Constitución europea, a propuesta de Zapatero y el resto, y al poco tiempo, la lección que dieron los franceses votando que no, porque se dieron cuenta de que no se necesitaba una Constitución para Europa, y lo que se necesita es mejorar la calidad de vida de los europeos, que haya trabajo, que no nos frían a impuestos. Los franceses, y los holandeses dieron una lección de madurez política a los que mandan en sus países y a toda Europa.
Así que aplicando el cuento, comprendí que Andalucía tenía una ocasión de oro para hacer lo mismo con el Estatuto andaluz de la componenda y el amplio acuerdo. ¿Qué puede pasar si sale NO?, pues nada, bueno, al contrario, pueden pasar muchas cosas.
Sería un aviso a los políticos de que los ciudadanos están hartos de decir que sí a todo lo que les proponen, de que lo que se necesita es que resuelvan los problemas que tienen los ciudadanos y que no creen nuevos problemas, porque anda que si costó desarrollar el Estatuto actual, que ni se ha podido concluir por completo, y si ahora sale este, pues otra vez a empezar, más gastos y más problemas.
Claro, un Estatuto último modelo no lo vas a guardar bajo el tendejón, habrá que comprar una plaza de garaje nueva, habrá que aumentar el gasto hasta que funcione correctamente, y seguro que consume más, y además, a ver que no surjan nuevos problemas con las nuevas cosas que se proponen, que eso ya entra en el despilfarro.
Un Estatuto es como unos zapatos, cuanto más los usas mejor te quedan, hasta que se acaban, pero este no es el caso. Pues así llegué a la conclusión de que los andaluces no necesitamos para nada un nuevo Estatuto, y lo que de verdad nos hace falta son unos nuevos políticos, o los mismos, haciendo las cosas mejor. Ajá, ahí está la clave. Y lo explico.
Con decir Sí al nuevo Estatuto los andaluces no conseguimos nada, pero diciendo No, que pasa si decimos NO, pues que se arma. Entre otras cosas, porque los ciudadanos no le dicen NO a Andalucía, sino que se lo dicen a los políticos que tiene Andalucía, y a su forma de hacer las cosas. Es genial, no les parece.
Como dice la canción de Ciudadanos, vamos a darles un susto, vamos a ver que pasa si sale el NO; pues que dirán todos a coro, o cambiamos o nos echan, que aquí vienen los de Ciudadanos pisando fuerte, y esto es como en los toros el tercer aviso. Que caras se les pueden quedar, y lo mejor no es eso, hay más.
¿Que harán entonces los políticos andaluces?, pues ponerse a trabajar como locos antes de que lleguen las generales, estoy seguro de que Andalucía va a mejorar en un año, más que en diez, que falta le hace. Y todo gratis, sin ningún problema, sin ninguna consecuencia.
Si los andaluces votamos NO, veremos a los políticos trabajando a tope, y como consecuencia, las cosas mejorarán, que cuando se ponen lo saben hacer, pero con tantas chorradas que se inventan se acaban despistando. Hay que devolverlos al buen camino.
La opción más inteligente, no solo porque nos importe Andalucía, si no por nosotros mismos, es votar No; porque no pasa nada malo y puede pasar mucho bueno. Pero esto es solo lo que yo pienso, cada uno que vote lo que le parezca, yo voy a votar NO y a ver que pasa.
Además, ya habrá tiempo de votar Estatutos, y seguro que el próximo que presenten es muchísimo mejor. Tenemos que aprender a ejercer de ciudadanos, que si no nos tienen en cuenta.
Había un par de señores, ya mayores, y va uno y le dice al otro que se ha enterado que los de Ciudadanos, los del partido del chaval ese que salió desnudo en los carteles, que dicen que hay que votar NO al Estatuto; y le contesta el otro, pues en este caso valdrá más vestir al santo, que desnudar a la virgen, y me quede pensando. No lo entendí, luego me di cuenta de que se refería a Andalucía, y me reí.
Tras colgar, me quedé pensando en lo largos que son algunos en esta tierra. Y no le falta razón al ciudadano, ¿qué necesidad tiene Andalucía de un nuevo Estatuto?, pues la verdad que ninguna, si todavía hay más del 50 % por desarrollar del anterior. ¿Y por qué tienen tanto interés el PP, el PSOE, e IU en sacar un nuevo Estatuto?.
Lo primero que resulta sospechoso es que se unan IU y el PP en algo, que se una el gobierno de Andalucía con la oposición, que se una el PSOE con sus rivales políticos. No se ponen de acuerdo para nada y resulta que para lo del Estatuto de Andalucía se comandan. ¡Qué cosas más extrañas se ven en la política en los últimos tiempos!.
Así que pensando, pensando, he llegado a las siguientes conclusiones, que les expongo:
Si no hay necesidad de un nuevo Estatuto, porque lo han hecho de bricolage, solo porque los de Cataluña han sacado el suyo, y además se han puesto de acuerdo IU, PP, y PSOE para apoyarlo, no cabe otra explicación que lo que quieren es instrumentalizar la cuestión en beneficio propio. A estas alturas, ya sabemos que todos los políticos barren para su propia casa, ya son muchos años.
Vamos a ver, ¿usted compraría un coche nuevo, cuando el que tiene todavía está para durar un montón de años?, y quien dice un coche, dice una lavadora, un frigorífico, una televisión, o un ordenador. Evidentemente no, a no ser que le tocara la lotería.
¿Para qué se quiere un Estatuto último modelo?. Para presumir ante los amigos, para mostrarle al resto de España que Andalucía no es menos que Cataluña, para sentirse orgullosos de lo enormes que somos, o para nada de lo anterior. ¡Quién lo sabe!.
Al final solo encontré una explicación que al menos tiene sentido, lo hacen para legitimarse a sí mismos, para que veamos que son útiles, como el funcionario que cuando vamos a buscar algo muestra que está muy ocupado y que es muy necesario. Claro, es su trabajo. Y un nuevo Estatuto es como presentar una cuenta de resultados en una empresa. Andaluces, hemos trabajado, y aquí está la nueva gran ley que hemos hecho.
Y entonces me acordé del ridículo paleto que hicimos los españoles votando Sí a la Constitución europea, a propuesta de Zapatero y el resto, y al poco tiempo, la lección que dieron los franceses votando que no, porque se dieron cuenta de que no se necesitaba una Constitución para Europa, y lo que se necesita es mejorar la calidad de vida de los europeos, que haya trabajo, que no nos frían a impuestos. Los franceses, y los holandeses dieron una lección de madurez política a los que mandan en sus países y a toda Europa.
Así que aplicando el cuento, comprendí que Andalucía tenía una ocasión de oro para hacer lo mismo con el Estatuto andaluz de la componenda y el amplio acuerdo. ¿Qué puede pasar si sale NO?, pues nada, bueno, al contrario, pueden pasar muchas cosas.
Sería un aviso a los políticos de que los ciudadanos están hartos de decir que sí a todo lo que les proponen, de que lo que se necesita es que resuelvan los problemas que tienen los ciudadanos y que no creen nuevos problemas, porque anda que si costó desarrollar el Estatuto actual, que ni se ha podido concluir por completo, y si ahora sale este, pues otra vez a empezar, más gastos y más problemas.
Claro, un Estatuto último modelo no lo vas a guardar bajo el tendejón, habrá que comprar una plaza de garaje nueva, habrá que aumentar el gasto hasta que funcione correctamente, y seguro que consume más, y además, a ver que no surjan nuevos problemas con las nuevas cosas que se proponen, que eso ya entra en el despilfarro.
Un Estatuto es como unos zapatos, cuanto más los usas mejor te quedan, hasta que se acaban, pero este no es el caso. Pues así llegué a la conclusión de que los andaluces no necesitamos para nada un nuevo Estatuto, y lo que de verdad nos hace falta son unos nuevos políticos, o los mismos, haciendo las cosas mejor. Ajá, ahí está la clave. Y lo explico.
Con decir Sí al nuevo Estatuto los andaluces no conseguimos nada, pero diciendo No, que pasa si decimos NO, pues que se arma. Entre otras cosas, porque los ciudadanos no le dicen NO a Andalucía, sino que se lo dicen a los políticos que tiene Andalucía, y a su forma de hacer las cosas. Es genial, no les parece.
Como dice la canción de Ciudadanos, vamos a darles un susto, vamos a ver que pasa si sale el NO; pues que dirán todos a coro, o cambiamos o nos echan, que aquí vienen los de Ciudadanos pisando fuerte, y esto es como en los toros el tercer aviso. Que caras se les pueden quedar, y lo mejor no es eso, hay más.
¿Que harán entonces los políticos andaluces?, pues ponerse a trabajar como locos antes de que lleguen las generales, estoy seguro de que Andalucía va a mejorar en un año, más que en diez, que falta le hace. Y todo gratis, sin ningún problema, sin ninguna consecuencia.
Si los andaluces votamos NO, veremos a los políticos trabajando a tope, y como consecuencia, las cosas mejorarán, que cuando se ponen lo saben hacer, pero con tantas chorradas que se inventan se acaban despistando. Hay que devolverlos al buen camino.
La opción más inteligente, no solo porque nos importe Andalucía, si no por nosotros mismos, es votar No; porque no pasa nada malo y puede pasar mucho bueno. Pero esto es solo lo que yo pienso, cada uno que vote lo que le parezca, yo voy a votar NO y a ver que pasa.
Además, ya habrá tiempo de votar Estatutos, y seguro que el próximo que presenten es muchísimo mejor. Tenemos que aprender a ejercer de ciudadanos, que si no nos tienen en cuenta.
F. Sánchez