Según el diccionario de la RAE, se considera que la perversión es la acción de pervertir, y para esta última palabra figuran dos acepciones: 1) Viciar con malas doctrinas o ejemplos las costumbres, la fe, el gusto, etc, y 2) Perturbar el orden o estado de las cosas.
Alguien ha dicho que la política es el arte de la posible, como la perversión resulta posible, entonces es posible que haya una política perversa. Sin embargo, resulta más extraordinario lo que actualmente está ocurriendo en España, en la éjida del presidente Rodríguez Zapatero, cuando no hay acción política que surja de su gobierno que no pueda recibir la calificación de perversa.
El buen entendimiento considera que la política es el arte de gobernar, y la buena política es el arte de gobernar bien. ¿Gobierna bien el señor Zapatero?, no, rotundamente no.
No se puede considerar un buen gobierno, aquel que en vez de resolver los conflictos presentes en la sociedad, se ocupa de acrecentarlos, y de crear otros de nuevo cuño. Esto es lo que se hace, exasperando a los ciudadanos de forma continua y permanente, con la finalidad de crear conciencia de graves problemas.
La política antiterrorista ha dividido a los españoles en dos opciones bien claras, una que considera que se debe conseguir la paz a cualquier precio, representada por el presidente, su corte y allegados; y otra que considera que es imposible negociar con ETA por qué sus pretensiones son inasumibles desde la razón y el sentido común. ¿En que beneficia al gobierno de Zapatero esta controversia?.
Barbaridad semejante no se recuerda en la reciente historia de España, en la que la cultura española se pisotea, en lo que acontece en Cataluña con el idioma y las costumbres, auténtico etnocidio propio de la barbarie más aldeana y palurda. Erradicar el castellano de Cataluña será motivo de retraso cultural para el pueblo catalán, que difícilmente se resolverá en generaciones.
Esto genera violencia institucional sobre la mayoría de los ciudadanos, y miseria por doquier en la convivencia, que por supuesto se traduce en un retraso social, económico y político. Pero sin duda, algún beneficio debe procurarles al gobierno de Zapatero y al PSOE, para seguir insistiendo. ¿Cuál puede ser?.
En mi criterio, Zapatero está construyendo su electorado para el 2008, ésta es la única razón de todas las perversiones y barbaridades que nos regala con su política.
Está crispando a los españoles en su propio beneficio, con la maldad propia de un arribista trasnochado, de un jugador tramposo, de un gestor mezquino e inflexible.
Los electores catalanes y vascos del PSOE, no son antinacionalistas, aunque tampoco sean nacionalistas. Desean la paz, aspiran a la concordia, y no tienen ninguna aversión al federalismo, aunque sea republicano.
Aunque el PSOE haya perdido votos con Montilla, sabe que las elecciones catalanas son diferentes de las nacionales, en las que el voto retorna al PSOE, siempre que no interrumpa el desarrollo nacionalista de Cataluña. El voto joven no extremista le apoyará.
En el País Vasco, la negociación con ETA cumple el mismo rol, de impedir la huída de electores a otras formaciones políticas. El PSOE está haciendo lo posible para alcanzar la paz, y además esto le puede procurar algún voto joven.
La ley de Memoria Histórica, divide a los españoles, elevando a la categoría de mártires a los que no triunfaron en la guerra civil que ocurrió hace sesenta años y convirtiendo en verdugos a todos los que vivimos en la dictadura del franquismo, sin mover un dedo por derrocar al dictador, que prácticamente somos la inmensa mayoría de los españoles, incluidos los que pertenecen hoy al PSOE.
Se está cercando el voto de los descendientes del bando rojo, recordando sus orígenes y mostrando la legitimación de clase para heredar la voluntad de sus ascendientes. La memoria es la cárcel de la libertad, donde los votos de muchos españoles permanecen cautivos.
La política exterior, la más errática de la democracia, la que más ha aumentado el déficit comercial y el retardo de España en alcanzar los países a la cabeza de Europa, es una nueva representación del aislamiento secular de nuestro país, alejándonos del enemigo norteamericano y aproximándonos a los dictadores populares como Fidel Castro. Si España avanza en Europa, es por que la entrada de los nuevos países del antiguo telón de acero, más deprimidos, empuja hacia arriba.
La doctrina Salgado, de prohibir que algo queda, está midiendo la capacidad del gobierno de intervenir sobre la libertad de los españoles, y evaluando cual es el nivel de resistencia de los ciudadanos de este país ante la ingerencia del Estado en el ámbito de su libertad. Delimitando las líneas de resistencia a su discurso y preparando las estrategias para incordiar a la ciudadanía, y hacerle olvidar la realidad macro y micro económica.
La doctrina Caldera, de puertas abiertas a la inmigración, está abriendo una brecha en los servicios españoles, que va a ser difícil de cerrar en muchos años. Que vengan inmigrantes no es malo, siempre que puedan encontrar un trabajo; pero que crezca la población sin incrementar y adecuar los servicios sociales (educación, sanidad, justicia, administración pública), es terrible por que conduce inexorablemente al deterioro de la calidad de vida de los españoles.
A Zapatero, y a su gobierno, le molesta la España que hay, por que tiene la prepotencia del autodidacta, el complejo del incompetente, y la imprudencia temeraria del iluminado, que piensa que alcanzando el poder, éste le pertenece , es suyo y puede hacer lo que le venga en gana, y de hecho lo hace, para confirmarse en la posición de privilegio, ante sí mismo y ante los demás.
Desconoce nuestro presidente Las Memorias de Adriano de Marguerite Yourcenar, aquel libro de cabecera de su antecesor socialista en la Moncloa, donde descubrió aquella coletilla de “sin acritud” que tanto le agradaba. Zapatero, naufraga en sí mismo.
Pero como es Navidad, y hay que tener buenos propósitos, le voy a recomendar un libro a nuestro presidente, que estoy seguro de que no ha leído y en el que encontrará todo lo que necesita para legitimar su política y su posición de poder. Se trata de El tratado sobre la tolerancia, de Voltaire. Lea señor presidente y descubra lo interesante que puede ser la política, cuando uno no tiene que demostrar que es un buen gobernante, por qué está absolutamente convencido de que lo es.
La perversión de su política solo puede conducir a la confusión de sus electores, recuerde que estamos en España, donde la democracia se comprende como la opción de votar cada cuatro años y la libertad como poder decir y hacer lo que se quiera.
Erasmo de Salinas
Alguien ha dicho que la política es el arte de la posible, como la perversión resulta posible, entonces es posible que haya una política perversa. Sin embargo, resulta más extraordinario lo que actualmente está ocurriendo en España, en la éjida del presidente Rodríguez Zapatero, cuando no hay acción política que surja de su gobierno que no pueda recibir la calificación de perversa.
El buen entendimiento considera que la política es el arte de gobernar, y la buena política es el arte de gobernar bien. ¿Gobierna bien el señor Zapatero?, no, rotundamente no.
No se puede considerar un buen gobierno, aquel que en vez de resolver los conflictos presentes en la sociedad, se ocupa de acrecentarlos, y de crear otros de nuevo cuño. Esto es lo que se hace, exasperando a los ciudadanos de forma continua y permanente, con la finalidad de crear conciencia de graves problemas.
La política antiterrorista ha dividido a los españoles en dos opciones bien claras, una que considera que se debe conseguir la paz a cualquier precio, representada por el presidente, su corte y allegados; y otra que considera que es imposible negociar con ETA por qué sus pretensiones son inasumibles desde la razón y el sentido común. ¿En que beneficia al gobierno de Zapatero esta controversia?.
Barbaridad semejante no se recuerda en la reciente historia de España, en la que la cultura española se pisotea, en lo que acontece en Cataluña con el idioma y las costumbres, auténtico etnocidio propio de la barbarie más aldeana y palurda. Erradicar el castellano de Cataluña será motivo de retraso cultural para el pueblo catalán, que difícilmente se resolverá en generaciones.
Esto genera violencia institucional sobre la mayoría de los ciudadanos, y miseria por doquier en la convivencia, que por supuesto se traduce en un retraso social, económico y político. Pero sin duda, algún beneficio debe procurarles al gobierno de Zapatero y al PSOE, para seguir insistiendo. ¿Cuál puede ser?.
En mi criterio, Zapatero está construyendo su electorado para el 2008, ésta es la única razón de todas las perversiones y barbaridades que nos regala con su política.
Está crispando a los españoles en su propio beneficio, con la maldad propia de un arribista trasnochado, de un jugador tramposo, de un gestor mezquino e inflexible.
Los electores catalanes y vascos del PSOE, no son antinacionalistas, aunque tampoco sean nacionalistas. Desean la paz, aspiran a la concordia, y no tienen ninguna aversión al federalismo, aunque sea republicano.
Aunque el PSOE haya perdido votos con Montilla, sabe que las elecciones catalanas son diferentes de las nacionales, en las que el voto retorna al PSOE, siempre que no interrumpa el desarrollo nacionalista de Cataluña. El voto joven no extremista le apoyará.
En el País Vasco, la negociación con ETA cumple el mismo rol, de impedir la huída de electores a otras formaciones políticas. El PSOE está haciendo lo posible para alcanzar la paz, y además esto le puede procurar algún voto joven.
La ley de Memoria Histórica, divide a los españoles, elevando a la categoría de mártires a los que no triunfaron en la guerra civil que ocurrió hace sesenta años y convirtiendo en verdugos a todos los que vivimos en la dictadura del franquismo, sin mover un dedo por derrocar al dictador, que prácticamente somos la inmensa mayoría de los españoles, incluidos los que pertenecen hoy al PSOE.
Se está cercando el voto de los descendientes del bando rojo, recordando sus orígenes y mostrando la legitimación de clase para heredar la voluntad de sus ascendientes. La memoria es la cárcel de la libertad, donde los votos de muchos españoles permanecen cautivos.
La política exterior, la más errática de la democracia, la que más ha aumentado el déficit comercial y el retardo de España en alcanzar los países a la cabeza de Europa, es una nueva representación del aislamiento secular de nuestro país, alejándonos del enemigo norteamericano y aproximándonos a los dictadores populares como Fidel Castro. Si España avanza en Europa, es por que la entrada de los nuevos países del antiguo telón de acero, más deprimidos, empuja hacia arriba.
La doctrina Salgado, de prohibir que algo queda, está midiendo la capacidad del gobierno de intervenir sobre la libertad de los españoles, y evaluando cual es el nivel de resistencia de los ciudadanos de este país ante la ingerencia del Estado en el ámbito de su libertad. Delimitando las líneas de resistencia a su discurso y preparando las estrategias para incordiar a la ciudadanía, y hacerle olvidar la realidad macro y micro económica.
La doctrina Caldera, de puertas abiertas a la inmigración, está abriendo una brecha en los servicios españoles, que va a ser difícil de cerrar en muchos años. Que vengan inmigrantes no es malo, siempre que puedan encontrar un trabajo; pero que crezca la población sin incrementar y adecuar los servicios sociales (educación, sanidad, justicia, administración pública), es terrible por que conduce inexorablemente al deterioro de la calidad de vida de los españoles.
A Zapatero, y a su gobierno, le molesta la España que hay, por que tiene la prepotencia del autodidacta, el complejo del incompetente, y la imprudencia temeraria del iluminado, que piensa que alcanzando el poder, éste le pertenece , es suyo y puede hacer lo que le venga en gana, y de hecho lo hace, para confirmarse en la posición de privilegio, ante sí mismo y ante los demás.
Desconoce nuestro presidente Las Memorias de Adriano de Marguerite Yourcenar, aquel libro de cabecera de su antecesor socialista en la Moncloa, donde descubrió aquella coletilla de “sin acritud” que tanto le agradaba. Zapatero, naufraga en sí mismo.
Pero como es Navidad, y hay que tener buenos propósitos, le voy a recomendar un libro a nuestro presidente, que estoy seguro de que no ha leído y en el que encontrará todo lo que necesita para legitimar su política y su posición de poder. Se trata de El tratado sobre la tolerancia, de Voltaire. Lea señor presidente y descubra lo interesante que puede ser la política, cuando uno no tiene que demostrar que es un buen gobernante, por qué está absolutamente convencido de que lo es.
La perversión de su política solo puede conducir a la confusión de sus electores, recuerde que estamos en España, donde la democracia se comprende como la opción de votar cada cuatro años y la libertad como poder decir y hacer lo que se quiera.
Erasmo de Salinas
2 comentarios:
Voyeurismo
Perversión consistente en buscar la satisfacción sexual con la visión de escenas sexuales, bien en la realidad bien en película, material impreso, video o internet.
Exhibicionismo
La actividad consiste en enseñar zonas sexuales en público. En principio parece benéfica y generosas, propia de personas amistosas y dispuestas a compartir lo que poseen. Según como se haga, puede resultar lúdico y agradecido. Pero también puede acabar en una tunda de palos o en una visita de cumplido al calabozo policial más próximo.
Necrofilia
La necrofilia, de unas palabras griegas que significan atracción por la muerte (o por los muertos) es una perversión sexual consistente en hallar el máximo placer, cuando no el placer exclusivo, haciendo los tocamientos y fogosidades con personal ya fallecido. La definición estricta sería que necrofilia es la excitación sexual provocada por la contemplación, el contacto, la mutilación o la evocación mental de un cadáver.
Gerontofilia
La gerontofilia, de unas palabras griegas que significan atracción por la vejez, consiste en un interés preferente, o exclusivo, por tener relaciones sexuales o excitaciones con personas ancianas. Puede ser heterosexual u homosexual.
Pederastia o Pedofilia
Los niños y niñas tienen, generalmente, 13 o menos años de edad. Para que el trastorno se considere como tal, el individuo que lo sufre debe tener, al menos, 5 años más que el niño. En Estados Unidos se considera que alguien puede ser pederasta a partir de los 16 años (mayoría de edad penal en la mayor parte de los estados).
Y faltan algunas, como el sadismo y el masoquismo, esas cosas del bondage..., y otras como la zoofilia y el fetichismo, hay tanta perversión en la erótica del poder.
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