Conociendo a los personajes instalados en el Gobierno, bajo los auspicios del inefable, debemos ponernos en lo peor. El PSOE se ha quedado sin margen de maniobra con la crisis económica que no existió, por lo tanto es muy probable que se incremente la crisis política para ocultarla y desviar la atención.
Por ahora se está estirando la crisis de la oposición, a los intereses del Gobierno le viene muy bien que el Partido Popular siga en conflicto hasta el congreso de junio, porque así ocupa espacio en los medios de comunicación, que resta a la debacle económica que se está produciendo.
Tras el Congreso de la Luna de Valencia, vendrá la preparación de las elecciones vascas, porque está claro que Ibarretxe reculará en lo de la consulta, aunque antes paseará el Estado Libre Asociado por el escenario de nuestra paciencia. Es muy probable que en estas circunstancias ETA incremente sus actividad criminal, y la kaleborroka alcance la cronificación.
También están las elecciones gallegas en marcha, que como serán convocadas por Touriño, posiblemente se celebren a finales de año, pero incrementando la presión nacionalista hasta entonces por parte del BNGA que comenzará su campaña al tiempo que el PNV.
Luego tendremos las elecciones europeas para el año 2009, que serán una prueba de fuego para ver la resistencia del PSOE a su declive inevitable, y también para comprobar como encaja el nuevo PP tuneado en las expectativas de los electores. Si la situación está muy mal, no sería extraño que el PSOE convocara elecciones generales con cualquier disculpa, llámese crisis de gobierno o reforma constitucional, pero tendrían que estar extraordinariamente mal, para que esto ocurriera.
La conflictividad se incrementará en relación a la situación de declive económico, el cierre de empresas, los factores internacionales, la alta cifra de inmigrantes y autóctonos que se quedarán sin trabajo, ni subsidio, y la redistribución de la riqueza que se irá a las altas esferas, sobretodo por la especulación inmobiliaria de aquellos que se quedarán con las viviendas de los que no puedan seguir pagando la hipoteca.
A lo largo de este año, asistiremos a una situación de "crisis social" sin precedentes en lo que llevamos de transición, porque no hay diques políticos que puedan resistir la crisis económica que se avecina, esa que según Solbes y Zapatero no existía. El Partido Popular nunca se habrá alegrado tanto de haber perdido unas elecciones, y es que el que ríe el último, ríe mejor. Los que no vamos a reírnos somos los españoles, que las vamos a pasar canutas, gracias a la eminencia que ha convertido La Moncloa en un laboratorio experimental de la estupidez supina.
Erasmo de Salinas
Por ahora se está estirando la crisis de la oposición, a los intereses del Gobierno le viene muy bien que el Partido Popular siga en conflicto hasta el congreso de junio, porque así ocupa espacio en los medios de comunicación, que resta a la debacle económica que se está produciendo.
Tras el Congreso de la Luna de Valencia, vendrá la preparación de las elecciones vascas, porque está claro que Ibarretxe reculará en lo de la consulta, aunque antes paseará el Estado Libre Asociado por el escenario de nuestra paciencia. Es muy probable que en estas circunstancias ETA incremente sus actividad criminal, y la kaleborroka alcance la cronificación.
También están las elecciones gallegas en marcha, que como serán convocadas por Touriño, posiblemente se celebren a finales de año, pero incrementando la presión nacionalista hasta entonces por parte del BNGA que comenzará su campaña al tiempo que el PNV.
Luego tendremos las elecciones europeas para el año 2009, que serán una prueba de fuego para ver la resistencia del PSOE a su declive inevitable, y también para comprobar como encaja el nuevo PP tuneado en las expectativas de los electores. Si la situación está muy mal, no sería extraño que el PSOE convocara elecciones generales con cualquier disculpa, llámese crisis de gobierno o reforma constitucional, pero tendrían que estar extraordinariamente mal, para que esto ocurriera.
La conflictividad se incrementará en relación a la situación de declive económico, el cierre de empresas, los factores internacionales, la alta cifra de inmigrantes y autóctonos que se quedarán sin trabajo, ni subsidio, y la redistribución de la riqueza que se irá a las altas esferas, sobretodo por la especulación inmobiliaria de aquellos que se quedarán con las viviendas de los que no puedan seguir pagando la hipoteca.
A lo largo de este año, asistiremos a una situación de "crisis social" sin precedentes en lo que llevamos de transición, porque no hay diques políticos que puedan resistir la crisis económica que se avecina, esa que según Solbes y Zapatero no existía. El Partido Popular nunca se habrá alegrado tanto de haber perdido unas elecciones, y es que el que ríe el último, ríe mejor. Los que no vamos a reírnos somos los españoles, que las vamos a pasar canutas, gracias a la eminencia que ha convertido La Moncloa en un laboratorio experimental de la estupidez supina.
Erasmo de Salinas
1 comentario:
Que broma que estas cosas pasen. Mis saludos, Martha
Publicar un comentario