Me he tomado la molestia de comparar la situación de España, aquí y ahora, con el clima que se vivía en la Unión Soviética antes de la caída del Muro de Berlín, y la verdad que no hay demasiadas diferencias. Eso anuncia cambios.
En la URSS se negaban los problemas existentes, aquí también. Las cotas de paro habían llegado a poner en peligro el funcionamiento del sistema, aquí también. Un partido único totalitario tenía todo el poder, los medios a su servicio, e incluso los opositores estaban organizados a su medida, y aquí ocurre lo mismo. El futuro era incierto, y en España es más bien ineludible, porque tomando las decisiones erróneas sólo se puede alcanzar el fracaso.
Mientras tanto, el pueblo ruso, acostumbrado a callar, contemplaba horrorizado como la Nomenclatura seguía viviendo magníficamente, mientras ellos las pasaban canutas. Se habían dinamitado todos los valores y principios, por innecesarios, y en España ya no sabemos si el DNI sirve para algo más que para identificarse.
Del Gobierno se escuchaban consignas que culpaban al capitalismo, al enemigo yanke, a la libertad de todo lo que estaba ocurriendo en la Unión Soviética, aquí pasa lo mismo, los políticos españoles no son responsables de nada, si cometen errores, ha sido el destino, y de aciertos hace muchos años que no se puede hablar.
No, no se piensen ustedes que en la URSS no había justicia, en realidad si la había, pero no servía para mucho, porque estaba subyugada al pode político del gran comité central, y la Duma (el parlamento soviético), sólo servía para ratificar las decisiones del partido en el poder.
Eso sí, las promesas al pueblo de cambios próximos se hicieron permanentes, el socialismo real era el único camino hacia el futuro, y la prueba de ello es que en Rusia "nadie pasaba hambre", todos tenían una elevada educación, aunque para poco les servía, y una sanidad pública que carecía de recursos materiales, pero tenía legiones de sanitarios para atender los más mínimos problemas. Eso sí, la información que se repartía siempre eran píldoras intoxicadas de apoyo al régimen.
Había colas para comprar pan, y restricciones en la mayoría de productos que en Occidente se podían adquirir sin dificultad –ahora ya no se pueden obtener con facilidad, porque hay mucha gente que tiene todo su sueldo condenado de antemano a pagar las deudas contraídas-.
Se perseguía a las distintas creencias religiosas, el Estado ofrecía una educación en los valores del partido, no se podía discrepar libremente, y nadie, más que la minoría que se beneficiaba, estaba contento. Y todo esto, absolutamente enmascarado en la apariencia de que aquí no pasa nada.
Resultaba fascinante ver como toda aquella gente no hacía nada mientras les estaban expoliando los políticos. Unos por qué no se atrevían, otros por qué no sabían que decir, y otros, por qué estaban más vigilados que la caja de un banco. Pero Rusia era pacifista, quería la igualdad de sus ciudadanos, se ocupaba del medio ambiente produciendo más CO2 que nadie del planeta, y tenía un gran interés en que las repúblicas hermanas del planeta se aliaran a su causa civilizatoria. La máxima preocupación de los gobernantes, decían que era el porvenir de su pueblo, hasta que lo llevaron a la misma ruina, que ya no fue posible seguir ocultando.
Un día todo aquello estalló por los aires, el alcalde de Moscú se subió a un tanque, un señor llamado Gorbachov dijo que hasta aquí habíamos llegado, y el castillo de naipes organizado sobre la miseria de los ciudadanos rusos se vino abajo.
Como me recuerda Rodríguez Zapatero a Breznev y sus planes quinquenales, incluso a Stalin, ¿por qué será que a los dictadores de izquierdas le salen cejas singulares?. ¿Será de abrir los ojos ante al perplejidad que les produce ver como la gente no hace nada ante sus atrocidades?.
Biante de Priena
En la URSS se negaban los problemas existentes, aquí también. Las cotas de paro habían llegado a poner en peligro el funcionamiento del sistema, aquí también. Un partido único totalitario tenía todo el poder, los medios a su servicio, e incluso los opositores estaban organizados a su medida, y aquí ocurre lo mismo. El futuro era incierto, y en España es más bien ineludible, porque tomando las decisiones erróneas sólo se puede alcanzar el fracaso.
Mientras tanto, el pueblo ruso, acostumbrado a callar, contemplaba horrorizado como la Nomenclatura seguía viviendo magníficamente, mientras ellos las pasaban canutas. Se habían dinamitado todos los valores y principios, por innecesarios, y en España ya no sabemos si el DNI sirve para algo más que para identificarse.
Del Gobierno se escuchaban consignas que culpaban al capitalismo, al enemigo yanke, a la libertad de todo lo que estaba ocurriendo en la Unión Soviética, aquí pasa lo mismo, los políticos españoles no son responsables de nada, si cometen errores, ha sido el destino, y de aciertos hace muchos años que no se puede hablar.
No, no se piensen ustedes que en la URSS no había justicia, en realidad si la había, pero no servía para mucho, porque estaba subyugada al pode político del gran comité central, y la Duma (el parlamento soviético), sólo servía para ratificar las decisiones del partido en el poder.
Eso sí, las promesas al pueblo de cambios próximos se hicieron permanentes, el socialismo real era el único camino hacia el futuro, y la prueba de ello es que en Rusia "nadie pasaba hambre", todos tenían una elevada educación, aunque para poco les servía, y una sanidad pública que carecía de recursos materiales, pero tenía legiones de sanitarios para atender los más mínimos problemas. Eso sí, la información que se repartía siempre eran píldoras intoxicadas de apoyo al régimen.
Había colas para comprar pan, y restricciones en la mayoría de productos que en Occidente se podían adquirir sin dificultad –ahora ya no se pueden obtener con facilidad, porque hay mucha gente que tiene todo su sueldo condenado de antemano a pagar las deudas contraídas-.
Se perseguía a las distintas creencias religiosas, el Estado ofrecía una educación en los valores del partido, no se podía discrepar libremente, y nadie, más que la minoría que se beneficiaba, estaba contento. Y todo esto, absolutamente enmascarado en la apariencia de que aquí no pasa nada.
Resultaba fascinante ver como toda aquella gente no hacía nada mientras les estaban expoliando los políticos. Unos por qué no se atrevían, otros por qué no sabían que decir, y otros, por qué estaban más vigilados que la caja de un banco. Pero Rusia era pacifista, quería la igualdad de sus ciudadanos, se ocupaba del medio ambiente produciendo más CO2 que nadie del planeta, y tenía un gran interés en que las repúblicas hermanas del planeta se aliaran a su causa civilizatoria. La máxima preocupación de los gobernantes, decían que era el porvenir de su pueblo, hasta que lo llevaron a la misma ruina, que ya no fue posible seguir ocultando.
Un día todo aquello estalló por los aires, el alcalde de Moscú se subió a un tanque, un señor llamado Gorbachov dijo que hasta aquí habíamos llegado, y el castillo de naipes organizado sobre la miseria de los ciudadanos rusos se vino abajo.
Como me recuerda Rodríguez Zapatero a Breznev y sus planes quinquenales, incluso a Stalin, ¿por qué será que a los dictadores de izquierdas le salen cejas singulares?. ¿Será de abrir los ojos ante al perplejidad que les produce ver como la gente no hace nada ante sus atrocidades?.
Biante de Priena
7 comentarios:
(...) Y sin embargo, algo queda de todos ellos. En la senda perdida por la que se alejan, entre la bruma que cubre el paso y las huellas de los rezagados, de tantas víctimas y héroes, que jamás pretendieron ser lo uno y lo otro y, a menudo, fueron ambas cosas a la vez, vibra en el aire como una nota, un eco peculiar, un sentimiento. Junto a lo peor que es capàz de ejecutar el hombre, queda también lo mejor que este puede dar de si: la emoción de la esperanza, la abnegación, el ansia de libertad, la solidaridad ingenua y magnífica que late en el corazón humano. No el triunfo que no existió, que nunca existe; sino el espíritu de rebelión y de lucha, la suma de las conciencias y los corajes individuales. Quizá todo no fue más que un inmenso error, una de esas trágicas piruetas que, de vez en cuando, nos depara la cruel rutina de los siglos. Pero no hubo error ninguno en el valor oscuro, enternecedor y anónimo, de quienes en manos de unos y de otros, pero empujados por la fe de un sueño, apretaron los dientos y se pusieron de pie, en su fugaz instante de gloria, para dejarse matar y padecer por la libertad del hombre. De ese hombre al que creyeron necesario salvar; no en el cielo sino aquí, en la tierra.
Mienten como bellacos quienes afirman que tanto sacrificio fue inútil; que todo se derrumbó con las estatuas y los símbolos. Entre sus pedazos permanece intacto lo que de verdad sobrevive a cada revolución, a cada sueño condenado al fracaso. Aunque sobre los tronos demolidos con sangre humana se alcen, tarde o temprano, nuevos canallas y nuevos tiranos, siempre quedará aquello de lo que es capaz el corazón del hombre cuando se rebela y lucha. Y en la huella de todos esos pobres fantasmas olvidados resonará, eternamente, el aldabonazo terrible que dieron en la puerta cerrada de la Historia. En el mundo habrá otros zares y otros tiranos; pero quienes pretendan dormir en sus camas siempre velarán con miedo. Tal vez eso decía el grito silencioso del mujik agonizante, aquel 17 de Octubre en la ciudad que hoy se llama, de nuevo, San Petersburgo.
(El cigarrillo de John Reed
Arturo Pérez Reverte)
http://perso.wanadoo.es/lawebdefilemon/ArchivosTIA.
es usted un filosofo de primera, biante. ha logrado lo que nadie.
si otros consideran que por exagerar de manera ridicula ha hecho daño a la critica merecida de zp, alla ellos.
yo sigo maravillado de usted.
berenger
¿Qué tal va de la gripe berenger?
solo 4 minutos para reaccionar? si algo es destacable de la urss es que siempre te estan observando.
por lo demas, bien. gracias.
berenger
A ZP le ha venido bien la gripe, ahora por las teles y por la prensa ya no salen las colas del paro, salen las del aeropuerto con personas con mascarilla.
Recluta Berenger, ¿qué nuevas órdenes les han dado a Uds 3 y la mula Francis los nazis monclovinos?.
Gracias por su piojosa respuesta.
Los fascistas provocando y sus compinches berengenas incordiando.
http://blogs.nuevatelevision.es/anghara/
http://anghara.wordpress.com/2009/05/08/la-izquierda-apoya-las-amenazas-de-muerte-y-el-apedrear-parlamentos/
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