Parece una provocación, pero es un Gobierno

Si ustedes pidieran en un restaurante un filete de añojo poco hecho y les trajeran una hamburguesa, se sentirían defraudados, protestarían y pedirían la hoja de reclamaciones sin duda, al igual que si pidieran un lenguado fresco y les presentaran en el plato un filete de fletán congelado en alta mar. No, no es lo mismo, no, no tiene gracia.

Sobretodo cuando ustedes pagan impuestos para que les proporcionen los mejores productos y les dan auténtica mierda aromatizada. Que no, que no tiene gracia. Que no, que esto no es una democracia.

La democracia ha sido reducida al proceso de elegir en las urnas los candidatos que se presentan, y luego hacer una trenza de mayorías para alcanzar el poder; pero en realidad no es solo eso.

La democracia se ha convertido en un juego en el que los que participan como representantes elegidos por sus amigos viven a costa de los demás, como si fueran señores feudales. No, no tiene gracia, que unos tarugos se hayan hecho con el poder vendiendo victimismo histórico, fíjense: José Blanco, Ministro de Fomento, José Luís Presidente, y Maria Teresa, haciendo feminismo de chequera con la niña Aído. Verán, esto es ridículo, da igual que seamos españoles, incluso para este país es ridículo. Trinidad Jiménez ministro de Sanidad. El hermano del cuatrero de educación. Y la sin-dvd-no-hay-paraiso de cultura. Parece una provocación, pero es un Gobierno

Y de la oposición que voy a contarles, los nacionalistas declarando la guerra a la nación española todos los días y luego perdonándonos la vida a todos los que nos sentimos españoles, y los populares coleccionando cromos de poder a ver si logran hacer algún día a Mariano santidad.

Esto es un cachondeo, sí. Hay una legión organizada de parásitos en el poder que viven a costa de todos los demás, igual en tiempos de crisis, que antes. Yo quiero ver en la cárcel o en el exilio a todos estos sinvergüenzas organizados para delinquir en nombre de su partido o a título personal. Y también quiero ver en la cárcel a los fiscales que callan y miran hacia otro lado cuando ven un delito contra la democracia, y a los jueces que juzgan pensando en su futuro, y a los policías que no hacen nada, y dicen que no pueden hacer nada.

Verán señores y señoras, vivimos en España, un estado en el que la corrupción y el latrocinio son práctica generalizada y no una rareza en política. Vamos hacia la rebelión civil a pasos de gigante. Pagamos por una democracia de primera y nos ofrecen demagogia putrefacta. Quizás haya llegado la hora de NO PAGAR IMPUESTOS, ni leches. Ante la ausencia de garantías en el uso de dinero público por estos personajes, se deposita el dinero en el juzgado correspondiente, con una nota que diga: el señor o la señora tal, en representación de la empresa o de si mismos, deposita en este juzgado la cantidad correspondiente a sus impuestos, mientras no quede claro que el Gobierno no lo utilizará en acciones corruptas o menesteres contrapuestos al bienestar público. Yo mis impuestos no se los dejo a Pepiño para que se haga una carretera a Villa PSOE en la Isla de Arosa.

Mañana es domingo de resurrección. A ver si hay suerte y dimite alguien.

Erasmo de Salinas