La doctrina Salgado

Hace menos de un mes, en un artículo escrito en Ciudadanos en la Red, consideraba que la señora ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, era la musa del régimen.

Tras ser rechazada a nivel internacional para ocupar la dirección de la OMS (exactamente por sus escasos conocimientos sanitarios), parece que quiere recuperar el tiempo perdido en los meses de campaña y viajes de promoción, y ha vuelto con ímpetu y genio inusuales, para civilizar sanitariamente a los españoles, que aceptamos lo que nos echen.

En esta singular carrera que se ha propuesto contra la razón y el sentido común, la señora Salgado, ingeniera y economista, que en su dossier profesional no presenta ni un curso del INEM de interés sanitario reconocido, se ha propuesto rellenar el vacío religioso que nos acontece, con una nueva religión: la doctrina Salgado, erigiéndose en su principal profeta.

Esta señora que desconoce absolutamente las características humanas de los ciudadanos y de la salud (bienestar físico, psíquico y social, OMS, 1947), con una petulancia que sólo puede competir en provocación de perplejidades y asombros, con la incompetencia de su mentor, el señor Rodríguez Zapatero, se ha montado una cruzada desde el ministerio que rige, contra las consecuencias del mal vivir.

Cada día estoy más seguro que su principal fuente bibliográfica son los ejemplares extraordinarios de la revista Muy Interesante (si al menos fuera Discóvery Salud, señora ministra). Desde la más impresionante incompetencia, nos induce al cambio de vida, de hábitos, de conductas, de pensamientos, de creencias, y de esperanzas.

Les hago una relación de las maravillosas propuestas de la Doctrina Salgado:

Ley contra el consumo de tabaco: posiblemente la decisión política que ha causado más problemas en la libertad de los españoles desde la llegada de la democracia. Acto segregacionista y discriminador donde los haya. Un elemento más para la distorsión de la convivencia de los ciudadanos de este país. Resultado: dicen que medio millón menos de fumadores. La presidenta de la Comunidad de Madrid, ha dicho que despacito, con buen criterio, y ha presentado demanda correspondiente al Tribunal Constitucional.

Plan Nacional Antidrogas: después de sus geniales campañas, que han costado millones de euros, descubrimos que el consumo de coca se ha duplicado desde 1999, y arguye que es por que la “perica” ha bajado de precio, le agradezco que no haya dicho que es una demostración de que los españoles tienen más poder adquisitivo. El consumo esporádico de Cannabis ha disminuido (señora ministra “esporádico” es una cosa y “habitual” es otra, que en este caso ha aumentado). Nada sobre las pastillas. Nada sobre los muertos por sobredosis. Nada de nada.

Programas contra la comida insana: directamente contra el mercado, Burger King y Mc Donnalds (se le nota la inquina yankee), primero se había dedicado a la prevención de la obesidad infantil, y a recomendar que las pizzas fueran comida de sílfide. Los españoles han tragado, pero los norteamericanos, que tienen sucursales por todo el mundo y nunca habían observado tanta memez, han dicho que entendido el mensaje y han sacado hamburguesas super XXL. Esto ha enfadado a la señora Salgado.

Otras cosas relacionadas con la alimentación: nos preparan para la gripe aviar que nunca llegó, se gastan una fortuna en vacunas, y hacia primeros de mayo se produce una epidemia de salmonellosis en los pollos y la ministra haciendo campaña para acceder a la OMS. Cuando regresa, menos mal, ya estaba resuelta.

Ley contra los anisakis: esos gusanos que deben llevar en el pescado toda la vida, pero que ahora cobran vital importancia en la salud de los españoles. No conozco a nadie que haya visto un solo caso. En 1998 hubo 1 caso en España, en 1999, aumentó, hubo dos. Un especialista ha dicho que llegó a detectar 24 casos en los últimos años, y el catedrático de bromatología de Murcia, dice que las medidas propuestas por el ministerio son innecesarias, si se toman algunas precauciones. Se acabaron los boquerones en vinagre.

Programas de prevención del envejecimiento: señora Salgado, por mucho que se empeñe en prevenir no creo que consiga que los españoles no envejezcamos, lo que necesitan los ancianos españoles es asistencia, no prevención. Aunque si incorpora los “lifting” a la sanidad pública,(como ha hecho con las tan imprescindibles operaciones de cambio de sexo), nuestros mayores serán igual de mayores, pero tendrán mucho mejor aspecto.

Proyecto de prevención del alcoholismo: al parecer quiere poner etiquetas en el vino como las del tabaco, y disuadir de su uso a la población. Esto ha hecho que los cosechadores se hayan levantado al unísono, y la ministra les ha dicho que al menos va a decir que el vino no es “saludable, lo que viene a decir que es nocivo. Las medidas convergentes sobre el tráfico han conseguido que los restaurantes a los que haya que ir en coche estén cerrando, y no son pocos. A ver en que queda todo esto.

Medidas contra el Sida: a la señora ministra se le ha ocurrido que lo mejor para hacer frente a esta pandemia es la utilización del preservativo, y que los preservativos se dispensen en todas partes. Esto señora ministra se viene haciendo desde hace años. Otra cosa es averiguar por que aún así, los abortos se han incrementado en España en los últimos años de forma considerable. Tal vez si se estudiaran las causas de los mismos, se podría aplicar al estudio de mecanismos para afrontar el sida. Pero esto tendría que explicárselo con detalle, es para nota.

Medidas para mejorar la Atención Primaria: la ministra baila con lobos, ha apoyado la huelga de la campaña de 10 minutos para las consultas de los médicos, y al mismo tiempo al reunirse en el Consejo con los representantes de las autonomías les ha entregado un papelito de buenas intenciones y ha dicho que no hay un solo euro para mejorar la cuestión. Luego seguiremos igual, pero con el papelito, en el que figura explícitamente, hacer propaganda de lo bien que funciona la sanidad.

Programa para protección infantil de los Videojuegos: esta es la última perla de la “doctrina Salgado”, se ha sacado un programa con una asociación en la que recomienda textualmente: leer las instrucciones, enterarse de que va el juego y ver si es adecuado para nuestros hijos. Decir algo tan evidente, sólo puede partir de dos premisas, o su incompetencia es supina o piensa que somos idiotas. ¿Cuánto habrá costado la campaña?. Tras esto vendrán los programas de radio y televisión, las películas del cine, la prensa, los libros...

Según un informe de FUNCAS publicado en 2005, España tenía una de las tasas de longevidad más altas de Europa, y en el caso de las mujeres, la mayor esperanza de vida del continente. Tengo muchas ganas de observar cual ha sido el efecto de la “doctrina Salgado” sobre la salud de los españoles, si desciende la esperanza de vida tendremos un perfecto indicador, de las consecuencias de sus barbaridades.

En recientes declaraciones a la revista Tiempo (18/XII/06), la señora ministra, decía lo siguiente: lamentaría sinceramente que algún fumador u obeso se sintiera señalado personalmente por medidas como las que hemos emprendido, que no tienen otro objetivo que preservar su salud. Es verdaderamente alucinante ver como alguien impone un cambio de vida radical a los ciudadanos de este país, genera fobias y filias, amarga el devenir cotidiano un poquito más a los contribuyentes, y después, pide disculpas. No pida disculpas, dimita directamente señora Salgado. Tan lamentable actitud, solo puede provenir de una aptitud lamentable.

Pero en Ciudadanos en la Red, tenemos buen talante, y a veces, hasta incluso somos políticamente correctos, le vamos a hacer nuestras diez propuestas para su ministerio, con la esperanza de que algún día nos lea, y el año 2007 cambie de actitud o presente su dimisión, y por lo menos deje de darnos la trisca con su cruzada inquisidora por nuestro bien.

10 MEDIDAS PARA MEJORAR LA SANIDAD ESPAÑOLA

Ampliar la cobertura sanitaria: incluir nuevas prestaciones en la cartera de servicios, por ejemplo la odontología, la podología, la medicina preventiva personalizada, nutricionistas.

Introducir la psicología en el ámbito sanitario (figuraba en el programa electoral del PSOE 2004), y uno de cada 10 españoles acude al psicólogo, hay mucha mayor demanda que la oferta que presenta el sistema sanitario.

Resolver los problemas de gestión, que son muchos: listas de espera para diagnóstico y tratamientos, consultas masificadas.

Resolver la sobrecarga asistencial que supone la inmigración, adecuarse a la demanda y sus características. Recientemente usted misma ha reconocido que los servicios de urgencias hospitalarios comienzan a deteriorarse por este problema.

Solucionar los problemas laborales de los profesionales sanitarios, que también son muchos. Equiparar sus sueldos a nivel nacional, resolver la falta de especialistas, en Canarias, por ejemplo. Establecer acuerdos con los profesionales más allá de la burocracia y las buenas palabras.

Disminuir el elevado consumo farmacéutico, ajustando los recursos a las necesidades y no solo a la inercia. Establecer criterios selectivos más adaptados a la realidad para la utilización de determinados procedimientos.

Reducir la creciente desigualdad asistencial entre comunidades autónomas.

Cambiar el modelo prevencionista, por el modelo de intervención directa sobre los problemas sanitarios reales de la población. Si se hace prevención, establecer previamente las consecuencias de las campañas de propaganda, que no se hace.

Elevar la calidad de vida de los españoles. Mejorar la calidad de los servicios sanitarios, solo hay cobertura de las necesidades básicas para todos, pero una sociedad del bienestar como la nuestra requiere incorporar otras alternativas.

Requerir la implicación activa de los ciudadanos en la optimización de su salud, incorporar la educación sanitaria en las escuelas. Contratar personal para esta actividad; una hora o dos a la semana de clases sobre salud, impartidas por profesionales sanitarios, será mucho más eficaz a medio plazo que todas las campañas preventivas que se proponga con sus colaboradores; si sus colegas del ministerio no saben hacer más que prevención, contrate otros.

Señora Salgado, tiene usted en sus manos y en sus propuestas la salud de todos los españoles, y no lo está haciendo nada bien, más bien, lo está haciendo bastante mal, tanto que alguien como la secretaria general de la Federación Estatal de Comisiones Obreras, María José Alende, ha llegado a decir de usted que es “la peor ministra de Sanidad de toda la historia de la democracia”.

Debería tenerlo en cuenta y cambiar de actitud,le recuerdo una hermosa frase de André Malraux, para que la incorpore sobre el marco de la puerta de su despacho y la vea siempre que salga al mundo: “una vida no vale nada, pero no hay nada que valga una vida”. En cuestiones de salud, señora Salgado, hay que tener siempre presente al galenofobo Quevedo, cuando decía aquello de: “es un necio, quien confunde valor y precio”. Amén.
-Escudo Santa Inquisición-

Enrique Suárez Retuerta

C´s#: hoy precisamente, el TSJM le ha quitado la razón a la señora Salgado con su ley antitabaco. Al menos, en Madrid se podrá seguir fumando. Quien iba a decir que el humo de los cigarrillos representaría algún día la libertad. ¡Viva el humo!.