Permítase la sinéresis o crasis, el neologismo lo merece, con permiso de la RAE. “Socialistar” es reclutamiento de sociedad, la nueva forma de hacer política en este país. Lo hace el Partido Popular de Rajoy y lo hace el Partido Socialista de Zapatero. Alistar a la sociedad en un objetivo determinado.
Alguien podría pensar que quisiera referirme a procurar una sociedad más lista, grave error, en todo caso más listada, pintadita a rayas como una cebra, raya blanca, raya negra y así sucesivamente, rayita azul del PP, y roja del PSOE, en una secuencia indeterminada desde el morro hasta la cola del bicho.
“Socialistemos”, unamos a todas las fuerzas progresistas del país, sean de derechas, izquierdas, centro, nacionalistas, o altermundistas, y hagamos una gran formación “suprapartidista”, “metapolítica”. La innovación como método, la exclusión de lo pretérito; que orgulloso estaría Francis Bacon, el autor que en su “Rerum Novarum” dijo allá por 1605 que el Estado y la Iglesia debían separarse, porque la fe provenía de una “verdad revelada” y no de un proceso racional.
¿Acaso no es racional Zapatero?. Acaba de cargarse lo que quedaba de socialista al PSOE, para hacer una formación social, adaptada a las circunstancias siempre cambiantes de la política en nuestro país.
¿Para qué quiere a Alfonso Guerra, Joaquín Leguina o Ibarra en “su” partido?. Como le salió bien lo del cordón sanitario con el Partido Popular, ahora se ha propuesto hacer un cordón geriátrico para eliminar a “las viejas glorias” del partido. Mira que se lo advertimos a en su día, la voracidad del “cejismo” es insondable, pero no nos hicieron ni caso, que tras el PP vendrían los socialistas “históricos”, y por supuesto los nacionalistas fagocitados, porque la aspiración de esta nueva formación política que fue el PSOE en su día, es abrirse a la sociedad, incrustarse en la sociedad, y para eso no se necesita gente que piense y pregunte, sólo es preciso gente que calle y responda con la voz de su amo. Zapatero está haciendo lo que no pudo hacer Felipe González, aunque lo intentó en su día.
¿Y ahora qué?. Pues ahí lo tenemos, "socialistando", colonizando la sociedad española como si fuera una tribu pretecnológica de cazadores-recolectores. El Congreso del PSOE fue un paseo marcial, no hay oposición a Zapatero ni dentro de su partido, ni fuera de él.
Hay que reconocerle su mérito, llegó a la secretaría de su partido de rebote y en cinco años ha decapitado a los barones, a la oposición, al nacionalismo, a la sociedad, a los poderes económicos, para construir el país a la medida de sus sueños. Y todo lo más que se escucha es decir a Leguina que ya prepara a su nieta para que herede el futuro, y a Ibarra que así no juega.
España está “socialistada”, ya está preparada para la eterna revolución pendiente, todo a la medida de alguien que cree que la luna es de queso y piensa en el atracón que se van a dar los ratones cuando la alcancen.
Suerte y salud.
Biante de Priena
1 comentario:
Zapatero pide un aplauso para Felipe González
Sabe muy bien de la desafección de los veteranos. Hace unos días, Felipe González se descolgaba en el ABC con duras críticas a ZP por no apostar por la nuclear. Pero Zapatero es muy listo. En lugar de alimentar el enfrentamiento, pretende ‘matar al padre’ a besos. Así que pide en el 37 Congreso federal del PSOE pide aplausos para un Felipe González, que se mostraba agradecido. A nadie le amarga un dulce y nadie es inmune al halago.
Así que Zapatero, conocedor de la realidad humana prosigue con ‘besitos’ a los más veteranos del PSOE de quienes dijo “nada de esto habría sido posible, ni siquiera imaginable”. Además de Felipe, también recibió aplausos el saliente Ibarra. Y por si los veteranos corrían el riesgo de criticar la juventud de la nueva ejecutiva, recuerda que la nueva secretaría de Organización, Leyre Pajín, tiene la misma edad que Felipe González cuando fue elegido secretario general del PSOE: 31 años. Asunto zanjado, generación amortizada y nosotros, a lo nuestro. Igualito que en Italia.
Fuente: www.hispanidad.com
Publicar un comentario