desde 2.006 en Internet

viernes, 9 de marzo de 2007

Especial 10M: Tiempos de decisión


Rubén Múgica, hijo de Fernando, asesinado por la banda, y sobrino de Enrique, un hombre que combatió de verdad contra Franco, ha declarado: «El Gobierno debe decidir si sigue a merced de Eta o si empieza a perseguirla».

Cebrián, jefe de "información" y censura en la TVE del Carnicerito de Málaga, comunica hoy a la progresía, en un editorial de El País, que ha decidido no estar en la manifestación del 10 M.

Foro de Ermua, AVT y muchos colectivos ciudadanos y de víctimas han decidido apoyar la convocatoria del Partido Popular, por la libertad y contra la cesión a Eta.

El partido Ciudadanos también ha decidido apoyar la iniciativa, aunque sólo en la concentración del viernes por la noche en Barcelona, y en un comunicado enrevesado, acomplejado e incomprensible, probablemente redactado en Estocolmo, donde se acusa al convocante de dividir a los españoles.

Pero todo esto carece de importancia. Lo que cuenta realmente es lo que decidas tú. Y él. Y yo. Esta noche, una marea humana invadirá pacíficamente las calles de nuestras ciudades, y mañana, en la capital de la Nación, se vivirá la mayor manifestación en la historia de España, sólo comparable, probablemente, con el estremecimiento cívico causado por el asesinato de Miguel Ángel Blanco.

Son tiempos históricos, donde la neutralidad o la equidistancia son imposibles de asumir, ni siquiera por defecto. De la misma forma que no se podía estar con la concentración estalinista de los luppis y con la iniciativa democrática de Foro Ermua, en enero pasado, tampoco ahora se puede estar con un gobierno chantajeado y unos terroristas chantajistas, por una parte, y con las víctimas por otra. No hay espacio para el centrismo ni para la intermediación.

Son tiempos de decisión.

Especial 10 M: La hora de la verdad


Se acabaron las prebendas y los experimentos, los españoles estamos hartos de progres y arribistas, que en el nombre de la paz, sacrifican la memoria histórica reciente, para reinventar la historia lejana a su antojo, e intercalar episodios de gloria y humillación que solo existieron en sus sueños.

Nadie tiene derecho a conducir un pueblo por la mentira, por muy importante que se sienta. Los caminos de la verdad son extraños e imprevisibles. Rodríguez Zapatero, ha logrado unir a los ciudadanos de este país contra todo lo que propone. Se acabó el cuento. ¿Pero cuándo los mentecatos fueron recordados?.

Cuando un aspirante a héroe, que no da la talla, se propone alcanzar el reconocimiento público y entrar en las crónicas políticas en la sección más ilustre, ocurren cosas como las que estamos viviendo.


¿A quién quiere engañar?, ¿cómo se puede permitir que alguien para lograr su gloria personal instrumentalice la historia, la memoria, el dolor, la sangre, la esperanza, y la dignidad de un pueblo entero?. ¿Cómo se puede ser tan insolente, tan mendaz?. ¿Pero quién le ha requerido en su trágico papel de salvador?.

LAS CESIONES

Lamentablemente, vivimos los españoles las horas más bajas de la política, acontecida a lo largo de toda la transición democrática, que hemos recorrido desde que se refrendó la Constitución en 1978. Nos están destrozando la convivencia por intereses inicuos, egoístas, y zafios.

Es hora de que sepamos, de una vez por todas, como absolutamente todo, se está manipulando en estos momentos, para que el partido que acoge al señor Rodríguez Zapatero como líder, se pueda mantener en el poder.

Arranca este gobierno con una inolvidable mentira, inoculando el miedo a la ciudadanía, facturando la sangre derramada en el atentado del 11-M de 2003, en la cuenta de la alianza de Aznar con Bush y Blair y la guerra de Irak.

La retirada de tropas fue la primera cesión, lo que ha hecho que la balanza comercial con los norteamericanos y los ingleses, y sobretodo la reducción del flujo tecnológico y científico que provenía del otro lado del Atlántico haya cesado bruscamente, retardando nuestra consolidación definitiva como una potencia mundial autosuficiente, que posiblemente nunca llegaremos a ser, dada la pujanza de países como Brasil y los tigres asiáticos que pronto nos sobrepasarán como destino de interés económico.

La segunda cesión de Zapatero, ha sido abrir sin evaluar riesgos, el Título VIII de la Constitución Española, a los Estatutos a la medida de los aliados imprescindibles, para seguir gobernando cómodamente.

En Cataluña se ha producido una inversión de la discriminación en el tema de la lengua, es decir, hoy la lengua marginada es el castellano, pero el precario gobierno del señor Montilla, requiere apoyos condicionados por la desnacionalización progresiva como camino hacia la emancipación lunática que tiene en mente Carod Rovira. Saura, el de la falsificación curricular, soporta cualquier cosa por presencia pública y 24 millones de pesetas directos, a embolsarse con su compañera.

En Andalucía, hasta el PP ha participado en el asunto del “estafatuto de la realidad nacional”, que votaron positivamente un 31 % de andaluces confiados. Recreación política del legado catalán, para no sentirse discriminados ante la historia de la descomposición nacional.

La tercera cesión de Zapatero se produjo el día 30-D, tras el atentado de ETA en la T4 de Barajas y la muerte de los dos ciudadanos ecuatorianos que residían y trabajaban en nuestro país. Si hubieran sido ciudadanos de nacionalidad española, no se hubiera atrevido a continuar las negociaciones con ETA, pero como eran extranjeros, un jugador de lance, como él, arriesgó la jugada.

Dicen que rectificar es de sabios, la gran pregunta que nos hacemos los españoles es por qué no lo hizo el presidente. Pasado el tiempo, solo puede haber una respuesta: porque no podía hacerlo.

Su estilo personal, el talante, la paz, la progresía, el pensamiento Alicia, la mística del buenismo, las grandes ambiciones personales, y el poder que a su partido le permitía tener colocados a varios miles de compañeros, le impidieron rectificar.

Porque rectificando se salía de su trayectoria política a un año de las elecciones, y el “dulcismo político” le había proporcionado tan buenos resultados. Además, ¿qué otra política podría hacer el refundador de la Alianza de las Civilizaciones, el paladín de la paz mundial?. Evidentemente, a Zapatero le falta carácter para hacer otra política, por lo que fue asesorado para continuar la huida hacia delante haciendo lo mismo, aunque el escenario hubiera sido cambiado por el sector más duro de ETA.

La cuarta y última cesión, por ahora, ha sido la atenuación de las condiciones de internamiento del asesino múltiple, Iñaki De Juana Chaos, tras su chantaje victorioso de la huelga de hambre, que le permite convertirse en aspirante al liderazgo de ETA.

La organización terrorista ETA, lleva varios años pidiendo una solución negociada, porque el asedio judicial y policial de anteriores gobiernos, la había debilitado hasta condiciones jamás conocidas en su historia. Eta necesitaba negociar y Zapatero, también. Y así se hizo y se hace, a cualquier precio, contra muertos y vivos.

LAS MANIPULACIONES

El gobierno de Zapatero se ha movido desde el principio en el ámbito de la manipulación permanente de la opinión pública, hasta la cota del engaño intencionado. El presidente nos ha vendido humo a los españoles, como si de un gas natural se tratase.

El caso Endesa que sigue coleteando, es un buen ejemplo de ello. Los pactos íntimos con los catalanes son sagrados, porque de ello depende su tranquilidad en el gobierno, y eso ha hecho que el gobierno español haya sido advertido por Europa en más de una ocasión, por no dejar de intervenir desde su administración estatal en la opa lanzada por la empresa alemana E.on.

La política de puertas abiertas a la inmigración es una forma de renovar el electorado cansado de votar al Partido Socialista sin perder las elecciones en el futuro; evidentemente que España necesita inmigrantes pero en unas condiciones mínimas de planificación, adecuando servicios a sus características y adaptando a la población española a su acogida. La imposición de esta política de bienvenida alocada, solo puede venir promovida por los intereses electorales del futuro.

En cuanto al tema del matrimonio homosexual, o la violencia de género, son grandes temas que persiguen fundamentalmente la promoción de una imagen de tolerancia y lucha por las libertades, que lo que oculta realmente es un granero electoral, incluso a costa de la crispación de importantes sectores de la población. Es una cuestión de justicia la atención específica a ambos temas, pero lo que no puede hacerse es instrumentalizar de nuevo a las personas y sus vidas, por intereses ajenos a los genuinos.

Algún día se demostrará en el tema de la violencia de género, que la política desarrollada por el gobierno de Rodríguez Zapatero, ha sido la más errónea de la historia, pues ha introducido cotas de violencia institucional y mediática insoportables en la convivencia de las parejas españolas que multiplican en vez de amortiguar, los conflictos y desavenencias existentes.

Una política sectaria dotada de ingentes cantidades de dinero, para hacer proselitismo, bien organizada y planificada, con elementos como la discriminación positiva o la ley de paridad, que sin embargo no resuelven la precariedad laboral y económica de las mujeres, auténtico fundamento de la desigualdad.

En el tema del matrimonio homosexual, la política de subvención a la transexualidad, y otras escenografías, más que resolver una reivindicación histórica de los sectores implicados asistiendo a sus necesidades más perentorias, lo que se ha hecho es izar el tema como bandera de progresismo internacional, para ocultar numerosas incongruencias en la obtención de una igualdad real y plena.

En cuanto a la juventud, que poco han hecho los ministros de este gobierno; la juventud española nunca ha tenido mayor cota de dependencia de sus mayores, nunca ha estado mejor formada y nunca ha tenido sueldos menos equilibrados en relación a su esfuerzo y conocimientos. Por eso es tan importante la paz, y la propaganda de que se vive en una sociedad más libre, cuando en realidad, lo que se vive es en una sociedad más libre con muchas menos posibilidades de alcanzar la auténtica independencia parental, que es la que proporciona precisamente la libertad.

La movida permanente, el estado de bienestar artificial en el que se hace vivir a los más jóvenes, y la condena a la irresponsabilidad como supuesta virtud del progreso, es posiblemente el daño más irreversible que se ha causado a los ciudadanos del futuro en este país. Pero con tal de obtener pingues beneficios electorales, importa poco.

Hay otras muchas manipulaciones que tan solo mencionaré, y que los lectores pueden desarrollar con un poco de paciencia. La negación de que las tropas españolas se encuentran inmersas en procesos bélicos en Afganistán o Líbano, la bonanza económica coyuntural que no se sustenta sobre nuevas estructuras económicas para el futuro que puedan soportar el crecimiento, la ausencia de intervención definitiva en los temas de corrupción urbanística, la subvención permanente de los sectores culturales más afines y la desatención de los que realmente serían rentables, el confinamiento mediático de los medios de comunicación públicos que condiciona su disminución en la competitividad.

Y algunos, aunque pasan más desapercibidos no son menos importantes, como por ejemplo la colonización de la administración pública española con personal propicio, el desequilibrio creciente de la balanza comercial; la memoria histórica, como estrategia de segregación de la convivencia para afianzar los apoyos electorales históricos. Las leyes Salgado como elemento de medida de la tolerancia ciudadana a las imposiciones del Estado. Y otras muchas que riman con barbaridad.

Zapatero es el ejemplo último del fin del socialismo como modelo político, un sistema agotado e incapaz de mantenerse por sí mismo en el escenario político, si no es a costa de hilar muy fino y realizar un fetichismo de la mercancía ideológica que trata de colocarnos, en cada nueva escena del desasosiego.

Nuestro país no puede permanecer ajeno al mundo, cada día más globalizado e intercomunicado, en el que los ciudadanos se han hecho extraordinariamente intolerantes a la ausencia de libertad, y a la imposición de la igualdad social, siempre que se conserven las grandes diferencias entre ellos y sus dirigentes.

Los ciudadanos españoles no soportan el control externo que condiciona sus vidas, es el espíritu de los tiempos; por eso nuestro presidente, su gobierno y su partido, inventan extrañas ideologías cada día, porque sus antiguos votantes han comenzado a pensar que los socialistas a lo que verdaderamente aspiran, más que a la obtención de mayores cotas de igualdad social, es a ampliar la diferencia con quienes les han elegido, y se han cansado de que sigan haciendo el agosto a su costa, mientras se cargan las inmejorables posibilidades de nuestro país por sus complejos y mediocridades.

La hora de la verdad que se aproxima, coincide paradójicamente, con el esplendor máximo de las mentiras de Zapatero.


Biante de Priena

Enlaces Relacionados

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...