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viernes, 6 de junio de 2008

El sacrificio por Cataluña

Dice la noticia de El Periódico que de los 1.350 médicos que se colegiaron en Barcelona en el 2007, el 46,5% eran extranjeros, frente al 38,4% nacidos en Catalunya y el 15,1% en el resto de España. Un 70% de los colegiados extranjeros provienen de América Latina, principalmente de Argentina, Colombia y Perú. Un 11% de la Unión Europa, encabezada por Francia, Alemania e Italia y un 4% de la Europa del Este, procedencia que ha crecido más en los últimos años.

Preocupante es que la Generalitat y el Ministerio de Sanidad hayan preparado un decreto para acortar los procesos de homologación. Llama la atención especialmente una cifra, un 15,1 % provienen del resto de España. Cuando hace unos años esta cifra pasaba del 60 %. ¿Por qué no quieren los médicos españoles ejercer en Cataluña?.

La razón, evidentemente es política, la mayoría no están dispuestos a plegarse ante los criterios nacionalistas que les obligan a hablar en catalán. Por la misma razón, los médicos que engrosan el servicio catalán de salud, provienen en su mayoría de países del tercer mundo, de culturas diferentes, de esquemas mentales heterogéneos, eso antes de que sean españoles, porque el tripartit necesita siervos de su política y no profesionales con criterio propio. Primero la política y luego la ciencia. Las repercusiones se verán en los próximos años en los indicadores de salud de los residentes en Cataluña.

Igualmente ocurre con otras profesiones relacionadas con el bienestar humano, cómo la justicia, dentro de poco también tendrán que contratar jueces en otros lugares; como la educación, pocos maestros y profesores no nacidos en Cataluña quieren ejercer en esta comunidad, salvo que no les quede más remedio; con las fuerzas de orden público, que salen en cuanto pueden de la inefable política de la generalitat, los "mossos de esquadra" se han convertido en un instrumento político al servicio del tripartit.

Se puede extender el criterio a todas las profesiones, abogados, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales, ingenieros, arquitectos, aparejadores, etc. Si pueden elegir, no irán a Cataluña, y el déficit se completará con extranjeros gracias a la Generalitat. Pero también a los estudiantes, en proporción con otras comunidades de España, el lugar donde se ha notado más el descenso de Erasmus, mientras que en todas las comunidades españolas ha aumentado.

El declive de los servicios en Cataluña no es reciente, hace varios años que se ve que esta comunidad se ha convertido en foco de problemas en los servicios públicos, atracción para profesionales formados en países con menos recursos, y por lo tanto con peores condiciones.

Me alegro por los que vienen, si encuentran su futuro entre nosotros, pero realmente es penoso ver como la histeria nacionalista sacrifica la salud, la educación, el bienestar, la seguridad, la igualdad y la libertad de sus ciudadanos para seguir consolidando su causa.

Saben que nadie protestará. Tras la inmersión lingüística, vendrá la inmersión definitiva, tanto jugar a sumergirse, se terminarán ahogando en su propia mierda, y lo terminarán llamando Estrategias Nacionalistas de Progreso, en catalán, claro.

Biante de Priena

6 comentarios:

Anónimo dijo...

A NADIE LE GUSTA SOMETERSE A UN GENCIDIO CULTURAL Y POLÍTICO. A PARTE LA CARESTIA DE VIDA EN TODOS LOS AMBITOS ES ESCALOFRIANTE. LOS CLANES CATALANOIDES CONTROLAN HASTA EL MAS MÍNIMO DETALLE. LOS DERECHOS DE LAS PERSONAS SE VULNERAN SIN TON NI SON. TODO POR LA PELA, ES EL LEMA DE ESTOS APRENDICES DE HITLER.

Anónimo dijo...

Has comentado que el indice de estudiantes de Erasmus ha bajado en Cataluña. Quiero matizar, que de todos los estudiantes que he conocido, que han venido con la famosa Beca, no sabían que tenían que estar en clases que no fuera español. NO LO SABÍAN, solo les interesa en ESPAÑOL, POR LO CUAL TIENEN UNA GRAN DECEPCIÓN. De haberlo sabido no hubiera venido ninguno a esta zona de España.

Anónimo dijo...

EL CONFIDENCIAL ESPAÑA
La consejera Marina Geli estuvo al tanto de las irregularidades de la empresa sanitaria del Tripartito

El seísmo en la política sanitaria catalana no ha hecho más que comenzar. La semana pasada, profesionales de la salud del Hospital Universitario de Tarragona denunciaron ante la Fiscalía de Tarragona a la empresa sanitaria del Tripartito por malversar fondos públicos (ver noticia). La compañía pública en cuestión es Gestió i Prestació de Serveis de Salut (GiPSS), regentada por Lluis Bachs Cases, cuyo nombramiento se hizo directamente desde la Consejería de Sanidad catalana, a cargo de la socialista Marina Geli.

Además, durante la primera ‘edición’ del Tripartito, el vicepresidente de GiPSS fue Josep Maria Sabaté, actual número dos de la citada consellera. De ahí que fuentes sindicales defiendan que Geli estuvo al tanto desde el principio de lo que acontecía con dicha empresa, sociedad pública que ya tiene en su haber varias sanciones de Inspección de Trabajo y una querella criminal ante la Fiscalía Anticorrupción admitida a trámite el pasado 13 de abril.

Según ha podido comprobar este diario en el Boletín Oficial del Parlamento catalán, el Govern fue interpelado en enero de este año acerca de las numerosas irregularidades cometidas por GiPSS, tales como nombramiento ‘a dedo’ de trabajadores y dejación en las normas de higiene y seguridad laboral. La respuesta de Marina Geli, el 20 de febrero del mismo año, quitaba hierro al asunto asegurando que las contrataciones se habían hecho en conformidad con el comité de empresa. Algo que dicho comité niega y que contrasta con varios informes de inspección de trabajo de Tarragona.

El primero de ellos, fechado en 24 febrero en 2005 y al que ha tenido acceso El Confidencial, sancionó a GiPSS por “no facilitar a los representantes legales de los trabajadores la copia básica de trece contratos de trabajo”. En dichos documentos, “no aparece la firma de los representantes legales de los trabajadores”. Una falta de “carácter grave”.

Como ya publicó este diario el pasado martes, la problemática comenzó en diciembre de 2004 con el nombramiento de Lluis Bachs Cases a cargo de GiPSS: “Desde su llegada empezó a contratar a trabajadores sin proceso de selección, ni baremos, ni participación del comité de empresa”, afirman fuentes sindicales, “en este escenario, el comité de empresa a pesar de pedir información y transparencia solo ha recibido ‘palos’, ni siquiera tenemos el listado de trabajadores de la empresa, se oculta información de accidentes laborales graves, como una epidemia que hubo de Sarna Noruega que afecto a los trabajadores....y un larguísimo etcétera”.

Fricciones sindicales

El sindicato mayoritario entre los trabajadores de la salud en Tarragona es Comisiones Obreras (CCOO), pero dentro de esta formación existen divisiones. Según fuentes del comité de empresa de GiPSS, “el gerente (Bachs Cases), aliado con CCOO, ha conseguido revocar al comité de empresa y convocar nuevas elecciones sindicales para quitárselo de encima, al menos, durante los próximos dos meses”.

Es más, “el gerente está escogiendo las personas que se han de presentar en las próximas elecciones bajo la amenaza de perder el puesto de trabajo”. El todavía vigente comité de empresa diferencia entre CCOO y la Federación de la Administración pública del mismo sindicato, quienes realmente han puesto la denuncia ante la Fiscalía de Tarragona por malversación de fondos públicos antes referida.

Anónimo dijo...

Los médicos temen una avalancha de extranjeros de «dudosa preparación»

DOMINGO PÉREZ. MADRID.

El ministro de Sanidad, Bernat Soria, afirmó ayer en Alicante que la contratación de personal extranjero para paliar el déficit de mano de obra sanitaria debe tener una regulación común para todas las comunidades autónomas.
Al respecto, aseguró que la cuestión se debatirá en su anunciado como proyecto estrella para esta legislatura, el llamado «Pacto por la Sanidad de la Comunidades Autónomas». El Ministerio quiere «aligerar» en un nuevo decreto el proceso de homologación de los títulos de especialistas obtenidos en Estados no miembros de la Unión Europea.
Cabe recordar que fue Marina Geli, consejera de Salud de Cataluña, quien destapó la polémica al anunciar que estudiaba, para paliar la necesidad de médicos durante este verano, permitir ejercer a los MIR de cuarto año -sugerencia rechazada ya de plano por el Ministerio- y a profesionales médicos extranjeros, aunque no tuvieran su título homologado.
Para sustentar legalmente esta última posibilidad, Geli solicitaba a Soria un cambio en la Ley de Ordenación de Profesiones, que es exactamente lo que acaba de proponer el ministro. De hecho, la Comisión Técnica Delegada de Recursos Humanos ya lleva meses trabajando en un borrador que ya tiene casi ultimado y que podría ser presentado antes de julio.
Desde instancias profesionales se observan estos movimientos con desconfianza. Recuerdan a Geli que «poner en marcha lo que propone es ahora mismo ilegal», aunque matizan «que todo el mundo sabe que ya hay en España muchos médicos trabajando en estas condiciones, sin sus títulos homologados en muchas Comunidades».
Esto es algo más que una sospecha. Ayer mismo, el subdirector de personal del Sistema Andaluz de Salud, Antonio Cervera, reconocía que «todos los servicios de salud hemos incorporado excepcionalmente a profesionales que se encuentran en este proceso, es decir que tienen el título de la especialidad correspondiente, pero que todavía no lo han podido homologar». Echan la culpa a un sistema de homologación que tarda de media más de 10 meses en concluir los trámites.
En la Organización Médica Colegial (OMC) van más lejos. Sospechan que Sanidad y las Comunidades estén «preparando un «colador» para recibir a profesionales médicos sin unas garantías de formación y atención a los pacientes similares a las nuestras».
Recuerdan que en España no faltan médicos, «sino que están mal distribuidos» y que las plazas que no se cubren «son las que se pagan como mano de obra barata». La prueba: que cada año casi 800 médicos españoles emigran al extranjero.
En sentido inverso calculan que «al menos 3.000 médicos extranjeros de dudosa preparación» puedan irrumpir en el Sistema Nacional a partir del nuevo decreto. La OMC desea dejar claro que no se opone frontalmente a que lleguen médicos foráneos, sino a que estos no tengan la preparación adecuada. «Defendemos al paciente», aseguran, para lo que se ofrecen a colaborar en la formación de sus colegas foráneos.
«Sólo la homologación de títulos a médicos argentinos en un año -señala Juan José Rodríguez Sendín, secretario general de la OMC- equivale a los que validan cuatro facultades de Medicina españolas en el mismo tiempo. Lo grave es que los médicos extranjeros sólo son evaluados por sus papeles. Sólo cuenta sus expedientes. No son sometidos a un examen de competencias, habilidades e idioma, por lo que no ofrecen la misma garantía de calidad que los médicos españoles».
Robo de especialistas
«El SNS -prosigue- necesita flexibilidad. No puede ser que a un médico español le resulte más fácil marcharse a ejercer a Francia o al Reino Unido que cambiarse de Galicia a Andalucía. La existencia de 17 mercados (autonomías) provoca no sólo que no actúen de manera coordinada sino que. además, estén en permanente competencia. Se roban profesionales y, a igualdad de trabajo, hay diferencias de remuneración según comunidades de hasta un 25 por ciento». Asimismo apuesta por que «se plantee una revisión a fondo de las administraciones sanitarias».

Anónimo dijo...

LOS ENFERMEROS DE SATSE SE OPONEN A LA PROPUESTA CATALANA DE CONTRATAR A MÉDICOS EXTRANJEROS SIN TÍTULO HOMOLOGADO


SERVIMEDIA


Creen que lo que debe hacer el Gobierno es evitar la emigración de facultativos y enfermeros a otros países


MADRID, 03-JUN-2008

El sindicato de Enfermería Satse se opuso hoy a la propuesta hecha ayer por la consejera de Salud de Cataluña, Marina Geli, de contratar a médicos extranjeros en espera de ver homologado definitivamente su título para hacer frente a la falta de especialistas que tendrá este verano Cataluña, por considerar que la medida no garantiza que el facultativo esté correctamente formado.

En declaraciones a Servimedia, María José García, secretaria de Comunicación de Satse, argumentó que para que un profesional sanitario atienda a un paciente hay que "tener la garantía de que está correctamente formado" y para eso, añadió, debe estar en posesión de un título español que lo acredite.

A juicio de García, lo que tiene que hacer el Gobierno español para afrontar la falta de profesionales sanitarios, ya sean médicos o enfermeros, es velar para que los formados en España no se vayan fuera a trabajar.

Y es que, aseguró esta representante de Satse, muchos profesionales sanitarios españoles, "formados con una calidad reconocida", están yéndose fuera de su país a ejercer la profesión porque les ofrecen mejores condiciones laborales.

La consejera catalana de salud pidió ayer al ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, que considere la posibilidad de contratar a médicos extranjeros que estén en espera de homologar definitivamente su título, apoyándose en el artículo 18 de la Ley de Ordenación de los Profesionales Sanitarios, que permite, a través de la aprobación de un decreto, reconocer como especialistas a estos profesionales hasta que se les haya convalidado definitivamente la titulación.

Anónimo dijo...

Catalonia, Catalonia, coño, ya está bien de tratar a esta región, de los cortes de carreteras hoy en Galicia, Valencia, Huelva, etc. no decís nada, incluso nos van a dejar sin pescao, es que sois ombligistas joder.

La semana que viene ni carne ni pescao, y a la otra ni mantequilla, ¿y a la otra?

Esto parece el camarote de los Marx, apretujados y sin comida.

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