los chillidos de un impotente

A la impostura de la manifestación-trampa del 13 E ha sucedido hoy, en las Cortes, la patética actuación de un presidente desencajado y sin energías.

Con carita de niño regañado y refunfuñón a quien le han roto sus juguetes, el pobre Rodríguez hilvanó la habitual retahila de argumentos vacuos y embusteros, mal articulados y envueltos en esa retórica cursi y reiterativa que padecemos desde hace ya treinta y tres larguísimos e interminables meses: paz, unidad, paz, unidad, paz, paz, paz.
Como se le esperaba en el reconocimiento necesario e imprescindible del grave error cometido con la negociación-sesión, el iluminado accedió… a reconocer un error por exceso de optimismo a la hora de atisbar tiempos mejores.

Milagro en las alturas, pero bien insuficiente ante la demostración de fuerza y coherencia democráticas que se le venía encima, en voz del líder de la oposición, quien hoy habló no sólo en nombre de sus diez millones de votantes y de la derecha democrática y sociológica, sino también de una gran mayoría de los españoles, por lo menos ésa es mi esperanza, y de las víctimas del terrorismo.

Quiero compartir con nuestros lectores estas frases de honor y dignidad, pronunciadas por Rajoy, frente al síndrome Luppi que embarga al monclovita y a sus secuaces:

"¿De qué vale su palabra ahora, qué fiabilidad puede ofrecer ante cualquier propuesta? No ha dado la talla, le ha tomado el pelo un rebaño de asesinos y el responsable es usted, que lo ha tolerado".

"Usted aceptó esta tutela y a ETA utilizar sus peculiares argumentos para desatascar la situación".

"Ni usted ni nadie podrá tapar la boca a las víctimas".

"lo que pasa es que después del atentado no tiene más remedio que guardar las formas y ganar tiempo"…"Mientras dure este tiempo muerto no debe extrañarnos que el señor Zapatero se reúna con Josu Ternera o que sus compañeros socialistas vascos se reúnan con el entorno de ETA. Estamos ante una política antiterrorista, que no es política porque no se hace nada ni es antiterrorista, porque no se actúa contra ellos”.

"¿Es usted fiable? Porque no se si está en condiciones de hablar de pactos". "¿Cuánto vale su palabra después de lo que hemos visto esta legislatura? No le sobra crédito, va a tener que demostrar una voluntad inequívoca, tiene que haber gestos que permitan confiar en usted".

"Proclame que se ha roto su relación con los terroristas, y la de su partido; revoque en esta Cámara la resolución que le permitió hablar con ETA, el mayor error en los últimos años; vuelva a colocar a Batasuna en la ilegalidad real y prometa que no se presentará en las elecciones bajo otras siglas".

En su segunda intervención, ante la negativa de Rodríguez a responder a las preguntas, a hablar claro, a decir la verdad, Rajoy añadió:

"Nunca ha habido un presidente como usted, es que apoyarle a usted es un suicidio en la lucha contra el terrorismo".

"Usted no cumple nada de lo que dice".

"ETA no esta en tregua, ¿o puede usted afirmar contrario?, no habrá más treguas creíbles de ETA, la credibilidad del proceso es cero, no se puede dialogar bajo amenaza o chantaje, si usted no cumple le pondrán bombas y si no hay bombas es porque ha cedido", le dijo Rajoy a Zapatero, y concluyó espetándole que " su capacidad personal para negociar ha concluido con el mayor de los sonrojos colectivos que se recuerden, pero hay una salida, el pacto por las libertades. Ahí estaremos, donde usted estuvo y de donde usted se fue. El peor error es mantenerse en el error. Se puede derrotar a ETA y para eso algunos vamos a trabajar. Para negociar no".

La vergonzosa reacción de lo que queda de un presidente, cuando ya no había posibilidad de réplica por parte de Rajoy, fue perder los nervios y romper con chillidos de niño-rey su promesa de no politizar la lucha antiterrorista.

Malos tiempos para la democracia. Pero todos no hemos capitulado. Y hoy, muchos hablábamos por boca de un barbudo honesto, sincero y cabal. Desde la oposición a la cobardía, a la rendición y a la esclavitud.

Dante Pombo de Alvear, Reflexiones liberales