Cascos y 120.000 asturianos

Poco tiene que ver la Asturias actual con el oasis en el hielo que se habían montado los del PSOE e IU, con la complacencia del PP, coalición de poder e intereses auspiciada por La Nueva España, en contra de los intereses de los asturianos. 

Cuando uno relee en el periódico del Grupo Moll las crónicas del periodo que comprende los años del arecismo y el gabinismo, la década prodigiosa de las grandes obras faraónicas del Principado, sorprende que su connivencia con el poder sólo se puede comparar a la del diario cubano Gramma o al Pravda de la URSS, o los diarios del Movimiento Nacional del franquismo, al que, por cierto, perteneció el mencionado periódico asturiano. Su rentabilidad ha sido elevada durante los últimos años, fundamentalmente por los negocios públicos con los que resultó favorecido por sus mentores y patrocinadores políticos del PSOE y el PP. Además de la publicidad institucional y subvenciones con las que los poderosos han cultivado su actitud servil y agasajadora.

Clarín se hubiera divertido mucho despotricando contra semejante contubernio, pero en Asturias el periodismo independiente y crítico es tan escaso como el agua en el desierto. Algo que sin embargo ha cambiado a partir de la explosión de los medios alternativos de información en la red. Hoy se pueden leer crónicas magníficas sobre la deriva del poder en Asturias en cohesión con los intereses de los aprovechados que han utilizado lo público como fuente de enriquecimiento. Pero afortunadamente las cosas han cambiado. 

Hoy, los asturianos están ojo avizor y oreja alerta al respecto de la información que se produce en el Principado de Asturias. Son miles los que han recobrado el criterio crítico y han salido del burka informativo a que han estado sometidos durante la última década. Al igual que ocurre con la deriva de los partidos políticos implicados en el espectáculo bochornoso que ha conducido Asturias hasta la situación de máxima precariedad en la que se encuentra. Pocos asturianos olvidarán que el PP presentó una enmienda a la totalidad a los Presupuestos de Foro para que fuera apoyada por el PSOE y provocar la convocatoria de elecciones, tampoco muchos asturianos se olvidarán de los pactos del tripartito opositor (PSOE-PP-IU) para impedir que Foro pudiera gobernar. Sin embargo, ahora por fin tienen la oportunidad de materializar un gran acuerdo por Asturias y formar un gobierno de coalición entre el PSOE y el PP, igual que formaron una coalición en la oposición, con la participación o no de los comunistas de IU, que siempre le pueden ofrecer grandes ideas para arruinar Asturias aún más de lo que está.

Realmente creo que es la mejor opción para Asturias, una gran coalición del duerno que permita seguir ocultando a los asturianos el forjado de corrupción existente en Asturias, cuando hoy, precisamente nos hemos enterado que el juez Sorando ha declinado seguir investigando el mayor caso de corrupción de la historia de Asturias, posiblemente por qué las trabas que se imponen a su investigación son una auténtica fortaleza. Sin embargo, los vividores no deben dormir tranquilos a partir de ahora, la realidad no admite más propaganda que la que se ha vertido en los últimos meses.

Cuando las cifras de la situación de Asturias aparezcan en la Junta General del Principado, algo que ocurrirá gracias a la presencia de Foro, asistiremos al penoso espectáculo de contemplar a una congregación de rémoras entonar el canto a la miseria. Verán ustedes, sin acuerdos puntuales y mantenidos con Foro, para fortuna de Asturias y los asturianos, esta comunidad resulta aún más ingobernable que cuando Foro estaba en el poder. Lo que le pasó a Foro con el contubernio del duerno, va a ser una ínfima anécdota con lo que le va a ocurrir al contubernio del duerno con Foro en la oposición.

Jugaron con todas sus fuerzas para eliminar a Foro del escenario de la representación pública, pero desgraciadamente para ellos no lo consiguieron, ahora tenemos a Cascos con las manos libres dispuesto a dirigir la orquesta de 120.000 asturianos reclamando a coro decencia, honsetidad y rigor administrativo a los que, al final decidan gobernar Asturias. El grave problema que tienen los que han hecho mal las cosas es que ni con Foro, ni sin Foro tienen sus males remedio, están condenados a cambiar obligatoriamente. Y ese es el comienzo de una nueva etapa para Asturias, en la que el deterioro que sufre nuestra comunidad quemará y destrozará a todos aquellos que traten de engañar a los asturianos con sus versiones propias, contra los intereses generales de los asturianos.

Les aseguro que La Nueva España echará el cierre antes de un año, eso que ganaremos en libertad de expresión en Asturias, porque su futuro está más congelado que el iceberg que trataron de imponerle en la ruta a la formación política de Francisco Álvarez Cascos. La epopeya de Foro se escribe cada día, cada semana, cada mes, cada año. El tiempo juega a favor de la verdad y en contra de las mentiras y los aprovechados que han vivido a su sombra. El balance lo haremos en los próximos años, pero está claro que la situación política de Asturias nunca volverá a ser la que hemos vivido en las últimas décadas. Ahí está la auténtica victoria de Foro la de haber resistido la tormenta de hielo, la de permanecer a flote indemne, mientras los demás siguen descomponiéndose en prologanda agonía sin encontrar su alma perdida tras sus nefandos dislates.

Al final, va a resultar que Foro no era el Titanic como algunos anunciaban, sino un magnífico rompehielos para sacar Asturias de la glaciación del cuaternario en la que la habían dejado los del contubernio.

Enrique Suárez